ANÁLISIS
El Real Madrid visita Pilsen este miércoles con la imperiosa necesidad de ganar si quiere sortear problemas en la fase de grupos. La derrota en Moscú hace un mes le dejó sin red en esta Champions League. El raquítico triunfo ante el Viktoria checo hace dos semanas alivió algo la pesada carga sobre los hombros de Julen Lopetegui (2-1), pero no lo suficiente como para resistir también el 5-1 del Clásico. Por eso mismo este miércoles acude a la República Checa Santiago Solari como nuevo técnico merengue. Una llegada balsámica. Desde entonces han sido dos victorias consecutivas, sin encajar gol y recuperando esa flor que parecía peleada con los blancos. Casi todo ha cambiado en el Real Madrid en apenas siete días. Casi. Las incertidumbres sobre Gareth Bale se mantienen, sin embargo.
Convocatoria del Viktoria - Real Madrid
El galés salió el sábado del Santiago Bernabéu pitado por su propia afición, hastiada de la escasez de triunfos, pero también de la ausencia de un líder en el ataque blanco toda vez se marchó Cristiano Ronaldo este verano. Los focos apuntaban entonces hacia el expreso de Gales. Él mismo los reclamó para sí tras la final de Kiev, nada más confirmarse que su doblete valía la Decimotercera para el Real Madrid. Pero cinco meses después, Bale sigue sin coger la velocidad de crucero suficiente, alternando además demasiados periodos ‘atrapado’ en la estación.
Es el turno de viajar a Europa. Donde Bale sí mantiene un idilio. Según datos de Opta, ha participado directamente en ocho goles en sus últimos siete encuentros en fase de grupos en la Champions League (cuatro goles y cuatro asistencias). Un balance más acorde a su estatus de estrella. Aunque la cuestión no es realmente por números –donde el galés sí que resiste las comparaciones-, sino más bien por sensaciones. Por ejercer como locomotora de este Madrid. En su primer partido con Solari en el banquillo no le salieron las cosas. Tiene otra oportunidad más de lucir galones este mismo miércoles en el debut del argentino en Champions League.
Próximo partido
El otro que debutará en Europa será Vinicius. El brasileño vive su semana fantástica con el Real Madrid: el miércoles pasado debutó como titular ante el Melilla, el sábado debutó como goleador ante el Valladolid y, si todo transcurre con normalidad, debutará este miércoles en la Champions, con todas las miradas del madridismo sobre su cabeza. Son sus ocho días de oro. El debate sobre su titularidad está en todo lo alto. Al mismo nivel que el debate sobre las prestaciones de Bale. No hacen falta las matemáticas para correlacionar ambas situaciones. Si hay un jugador que ahora mismo representa a la perfección las ilusiones del madridismo, ése sería Vinicius. En el lado contrario, quizás estaría el ‘crack’ galés. El Viktoria checará el ‘estatus’ real de ambos en un momento crucial de la temporada para el Real Madrid.
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