Rakitic BetisGetty

Rakitic paga la ronda ante el Betis


EDITORIAL

Ivan Rakitic se siente como en casa en Sevilla. Fue allí donde se ganó fichar por el Barcelona en el que se convertiría en uno de los poquísimos jugadores capaces de ganar un triplete. Antes, había cortejado a una sevillana que le dio largas durante semanas. Pero el croata, siempre incansable, perseveró y se acabó casando con la que hoy es la madre de sus dos hijas. Resultaba obvio que si iba a Sevilla para medirse con el rival ciudadano de un club que lleva en el corazón era para liarla. Y lo hizo.

Porque igual que sucedió en el vestíbulo del hotel Melià de Sevilla, donde Rakitic conoció a Raquel Mauri, el Betis se le resistió al Barcelona. Le disputó el balón, le creó ocasiones y hasta arrancó algún que otro susto en el primer tiempo, en el que el cuadro azulgrana apenas tiró una sola vez a puerta a pesar de tener el partido bajo control de la mano de un Rakitic imperial, que tanto ayudó en la contención como decidió en la creación para ser decisivo en la finalización. Él mismo, a imagen y semejanza de Messi, empezó la jugada que culminaría con el primer gol de la noche y el que confirmaba al Betis como víctima favorita del croata, quien ya ha transformado 5 dianas ante los verdiblancos.

A partir de ahí explotó el Barcelona. El rosarino no tardaría en poner el segundo tras un error de Fabián en la salida y el croata le daría el tercero a Luis Suárez. Messi aún sumo el cuarto a la goleada tras jugada personal y dio el quinto a Suárez. Rakitic mientras se gustaba repartiendo juego a sus compañeros.

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De hecho, Valverde elogió la polivalencia del "4" en rueda de prensa: “Es un elemento de equilibrio importante. Puede acompañar a Busquets y también tiene llegada. Ivan tiene esa posibilidad de llegar, tiene gol, es un mediapunta pero después cuando tiene que jugar de mediocentro lo hace con solvencia”.

El ex del Sevilla tuvo su venganza particular por el derbi que hace dos semanas perdieron sus ex compañeros por 3-5 ante un Betis, que estuvo condenado por sus carencias defensivas ante el mejor ataque del mundo.

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