Cristian Pavón decidió irse de Boca en busca de recuperar su mejor versión, esa que lo llevó al Mundial de Rusia y llegó a cotizarlo en 50 millones de euros. Y, de a poco, ya empieza a recuperarla. En su segundo partido en Los Angeles Galaxy, el cordobés fue decisivo para el triunfo 2-0 sobre FC Dallas.
Tres días después de su debut, en el que había mostrado algunos destellos, Kichán volvió a jugar desde el arranque, nuevamente como extremo por la izquierda, y fue la gran figura del encuentro: si bien Zlatan Ibrahimovic marcó los dos tantos del equipo californiano, el argentino tuvo participación directa -y fundamental- en ambos.
En el primero, a los 22 minutos del complemento, el cordobés rompió la jugada con un pase en profundidad que entró como una daga para el lateral Jorgen Skjelvic, quien mandó el centro de primera para que el sueco definiera en soledad en el punto penal. Y a diez del final del encuentro, Pavón recibió dentro del área, encaró hacia el arco y fue derribado por un rival: el árbitro sancionó penal y Zlatan liquidó la historia.
Con el encuentro resuelto, el Mellizo decidió cambiar al argentino, que se retiró ovacionado por el público. Con la victoria, LA Galaxy cortó una racha de dos caídas consecutivas y ahora se ubica tercero en la Conferencia Oeste, a 15 puntos del líder LA FC.
Luego de la victoria, Pavón fue muy elogiado por Zlatan. "Es demasiado bueno para la MLS, creo que no durará mucho tiempo acá, y debemos aprovecharlo mientras siga. Es su segundo partido. En Washington fue nuestro mejor jugador y esta noche también hizo diferencia. Jugué con muchos grandes jugadores a lo largo de mi carrera y yo veo cuando un jugador es la diferencia y él es la diferencia. Creo que cualquier equipo quisiera un jugador así y estamos muy contentos de que esté con nosotros", concluyó el sueco.
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