El Atlético se lleva un castigo inmerecido y se complica la vida

De la manera más cruel ha llegado la primera derrota del Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano. Y también cuando menos hacía falta -si es que hay algún momento adecuado para perder-, porque los rojiblancos se complican la vida en la Champions League más de lo que parece tras caer ante el Chelsea en el tiempo de descuento.

Morata fue abucheado cada vez que tocó la pelota ante el Atlético de Madrid

No ha sido un partido brillante, ha sido más bien un partido práctico por parte de ambos equipos. Se conocían más que de sobra dos técnicos cortados por el mismo patrón como Diego Pablo Simeone y Antonio Conte, y han actuado como tal.

Se marcharon los rojiblancos al vestuario por delante en el marcador con un gol de Antoine Griezmann desde los once metros, y todavía tuvo tiempo Saúl Ñíguez de prácticamente haber matado el partido con un disparo que se marchó lamiendo el poste, pero en el segundo acto el Chelsea creció espoleado por ese tanto del punta francés.

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Álvaro Morata apenas tardó un cuarto de hora en igualar la contienda. El delantero ha sido pitado y abucheado cada vez que ha tocado el balón, pero lo cierto es que ha tenido alguna ocasión y al minuto 60 ha hecho barraca para poner las tablas.

El partido iba encaminado al empate, de hecho así lo mostraban también los cambios de Simeone, que ha dado entrada a José María Giménez y Nico Gaitán retirando del campo a Ángel Correa y Thomas, dando más fuerza a su propio campo, pero el que no quería el punto ha sido Batshuayi.

El delantero belga ha esperado hasta el último suspiro para ajusticiar al Atlético de Madrid, cuando más duele. El colegiado ni siquiera ha dejado que los rojiblancos sacaran desde el centro del campo, porque ha pitado el final justo en plena celebración Blue.

Así las cosas, el conjunto de Simeone se queda con un solo punto, tres por debajo de la Roma -que ha vencido ante el Qarabag- y cinco por detrás del Chelsea, que ha hecho pleno en sus dos partidos. El Atlético se obliga a ganar sus dos citas ante los de Azerbaiyán y esperar a ver qué pasa en las contiendas entre londinenses y romanos. No es el mejor escenario.