ANÁLISIS
El Real Madrid ha entrado definitivamente en un pozo. En el Santiago Bernabéu había perdido 7 puntos en La Liga ante rivales teóricamente menores (además de ceder otro empate ante el Tottenham en Champions League). Y hasta el momento sobrevivía en su carrera por el liderato por sus actuaciones fuera de casa (eran 13 victorias consecutivas en La Liga, récord en España). Sin embargo, la derrota en Montilivi este domingo ante el Girona lleva el mal momento merengue a otro nivel. A términos de crisis, ni más ni menos.
EL REAL MADRID PIDIÓ PENALTI EN EL PARTIDO ANTE EL GIRONA
No obstante, es difícil ver al Real Madrid comenzando la temporada de semejante manera: tercero en la clasificación, con apenas 20 puntos en su haber, y a ocho puntos de distancia del líder tras diez partidos. Completamente atípico. De hecho, para encontrar semejantes precedentes hay que recurrir a campañas de ésas notablemente malas. De ésas memorables por lo negativo.
La última, sin ir más lejos, en 2012-13. La que fue la última campaña de Jose Mourinho en el banquillo madridista, en la que los blancos no ganaron un solo título y finalizaron a quince puntos de distancia del campeón Barcelona, con media plantilla ‘levantada en armas’ contra su entrenador. Una campaña literalmente para olvidar. Y que comenzó exactamente igual que ésta: 20 puntos tras diez jornadas, tercero en la clasificación, y a ocho puntos del Barcelona. Sintomático.
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VARANE, SUSTITUIDO ANTE EL GIRONA POR LESIÓN
Algunas otras en el último siglo que comenzaron tan mal como la presente campaña no son menos recordadas por Concha Espina. Por ejemplo, en 2008-09, cuando Bernd Schuster fue destituido a principios de diciembre: pues tras las primeras diez jornadas marchaba cuarto con 23 puntos (tres más que en la actualidad incluso). Otra campaña nefasta fue la 2004-05, que se inició con la prematura marcha de José Antonio Camacho del banquillo blanco y terminó en el cenit del ‘Galacticidio’: tras las primeras diez jornadas, el Real Madrid tan sólo había sumado 19 puntos (uno menos que hoy en día), aunque marchase segundo en la tabla.
LA LIGA DEL CLAVO ARDIENDO EMPEZÓ IGUAL
El único precedente de buen recuerdo para los blancos debería ser la campaña 2006-07. En aquel entonces, tras las primeras diez jornadas, el Real Madrid llevaba los mismos puntos que en la actualidad: 20, y también marchaba tercero en la clasificación. La diferencia con los anteriores precedentes es que, pese a semejante mal inicio, el club merengue acabó siendo campeón en la recordada Liga del Clavo Ardiendo, con Fabio Capello en el banquillo. Claro que entonces, después de diez jornadas, sólo estaba a tres puntos del líder Barcelona y no a ocho como en la actualidad. Una distancia que nunca ha salvado el Real Madrid en su historia para ser campeón en España. Un dato que lo dice todo.
