Claudio Bravo es tema en la Copa América. Los hinchas lo piden en medio del partido de Chile contra Ecuador, por el bajo rendimiento de Gabriel Arias, las figuras del torneo no entienden el motivo de su ausencia, el capitán Gary Medel reconoce un problema a solucionar. Así que el referente histórico, el de la camiseta 1, toma la palabra en una actividad en Buin para mostrar su disposición de volver a jugar por Chile... si Reinaldo Rueda así lo quiere.
"Soy una persona adulta y sé cómo funciona esto. No tengo un problema absolutamente con nadie, no tengo que pedir perdón, ni pedir explicaciones a nadie. Mi labor es aportar, hacer mejor las cosas", lanza de entrada, a la prensa en el lugar.
Chile, un 'plantel' sin banca
"Iba con la disposición de sumar donde fuese, los lugares donde estoy me los gano con trabajo, no porque llevo 15 años en un lugar voy a pedir algo. Y más en la posición que yo estaba, que era saliendo de una lesión. Hubiesen sido mis primeros partidos después de la lesión que sufrí y por ende tampoco tenía motivos para pedir algo", complementa al respecto de las palabras de Rueda, que en el inicio de la convocatoria insistió en que no quería llevarlo a Brasil a ser suplente.
"Llevo tres, cuatro meses haciendo todo con total normalidad. Quiero agradecerle a toda esa gente que te escribe, que te echa de menos. Pero quiero dejarle claro a quienes me dicen que no quiero volver a la Selección: yo jamás me he restado, menos en esta pasada. Me puse a disposición del técnico cuando me visitó en Manchester, y estaba con la disposición de participar. No dependió de mí, dependió del técnico. No estaba en mis manos", relata sobre su presente, en el inicio de una serie de declaraciones muy similares sobre el rol del entrenador en la decisión de haber relegado al surgido desde Colo Colo.
De su futuro, agregó que "hablar de eso, todavía no. Sigo en mi período de vacaciones, ya pronto me toca volar a mi club. Empezar a competir allí, y ahí veremos lo que pasa. Todavía no termina lo de Copa América. Lo principal es volar a mi equipo, hacer las cosas bien allí y ver lo que pasa a futuro".
"Si el técnico viaja 11 mil kilómetros de distancia y te abre un abanico de posibilidades, aceptas y después no estás nominado, no depende de mí, depende absolutamente del técnico", complementó luego sobre las incongruencias que detectó de parte del cuerpo técnico cuando lo visitó, recuperado, en Manchester City.
"Si hubiese dicho cuando me visitó que no quiero ir nunca más, se lo digo abiertamente. Lo que a futuro se respecta a mí en la Selección no depende de mí. La disponibilidad para continuar está, pero el técnico sabrá quién hace mejor el papel, quién aporta más, quiénes son los mejores a la hora de competir. Yo estoy apto, depende del entrenador", manifestó en esa misma línea, y replicó la respuesta ante la consulta sobre la charla pendiente con los otros grandes del plantel: "Es el técnico quien hace la norma. Depende de él".
"Yo hace más de un año que no estoy ahí. No sabría decirte cuál es el funcionamiento, no he convivido con ellos, no he practicado absolutamente nada con el grupo", finalizó sobre el presente y la interrogante por un camarín 'quebrado'.
Sobre las amenazas que recibió Arias tras su error en el gol de Yoshimar Yotún que encaminó a Perú a la final, Bravo culminó: "Creo que no hay que prestarle valor a esas cosas. Todos hemos recibido críticas e insultos a través de redes sociales, pero fijar la mirada en algo que no es real, no es positivo. El que te escribe en redes sociales no actúa de la misma manera que cuando te encuentra en la calle. Hay que quedarse con la gente que te dice las cosas a la cara, mirándote a los ojos. En las redes sociales se esconden a través de un perfil falso. Cuando existen esas cosas no hay que tomarle valor. Creo que sí hay que hacerlo cuando te amenazan de muerte y te lo dicen a la cara, eso es para asustarse, pero no en redes sociales"
