Messi Barcelona Slavia Praga Champions LeagueGetty Images

El Barcelona menos goleador y casi el más goleado de la última década


ANÁLISIS

El Barcelona no tira. De acuerdo, es líder tanto en la Liga como en la Champions League pero en ninguna de ambas competiciones ha dominado salvo en contadas ocasiones. Alterna goleadas en el Camp Nou con partidos soporíferos a domicilio. Lejos de mejorar, hasta como local aburrió en la visita del Slavia de Praga, un partido en el que los hombres de Ernesto Valverde se quedaron sin marcar a pesar del descaro de Jindřich Trpišovský, que adelantó la línea defensiva de su equipo hasta casi el centro del campo sin que los barcelonistas le castigaran con gol alguno. No en vano este Barcelona es el más irregular de la última década.

BARCELONA FRÁGIL

Sin ir más lejos es el que presenta una media de goles a favor más baja de los últimos diez años. Al equipo le cuesta un mundo generar ocasiones para marcar y ha habido incluso partidos en los que se ha marchado al vestuario sin haber tirado una sola vez a puerta, algo impensable en un equipo que se gastó 270 millones de euros en verano y que sigue presumiendo de jugar al ataque. En términos relativos, los 2,2 goles por partido que el Barcelona marca esta temporada no solo son los más bajos de la era Valverde, que a su vez son menos contundentes que los de sus predecesores, sino que también lo son de la última década.

En sus dos primeras temporadas el Barcelona de Valverde se ha caracterizado por su solidez. Salvo en los descalabros de Roma y Anfield el cuadro catalán se mostró firme hasta el punto de ser uno de los menos goleados de los últimos años, especialmente en la primera temporada del 'txingurri'. Sin embargo, en la presente también el sistema defensivo hace aguas. En términos relativos solo el Barcelona del añorado Francesc Tito Vilanova encajaba más goles. Sucede que aquel equipo veía puerta con facilidad y lograba disimular la endeblez defensiva. Este no.

El artículo sigue a continuación

Este Barcelona, pues, es el menos goleador y el segundo más goleado de la última década, lo que se traduce en que también es el más irregular. El equipo sufre demasiado incluso en casa, el juego no enamora y a pesar de dominar la clasificación en las dos competiciones en las que está inmerso no transmite ninguna clase de seguridad. No son solo sensaciones. También los números hablan claro.

Anuncios