El partido del año, del siglo, el más esperado y el más absurdo de todos. En la ida, las tormentas obligaron a postergar el encuentro un día; en la vuelta, el ataque al ómnibus de Boca que hirió a varios jugadores tiñó de negro la Superfinal de la Copa Libertadores: futbolistas hospitalizados, reuniones entre los caciques de los clubes y la CONMEBOL.
¿Se posterga? ¿Se suspende?