Tras la destitución de Quique Sánchez Flores, Rubén Reyes, ha sido el elegido por el presidente azulón Ángel Torres, para dirigir al Getafe. La situación es complicada, con siete jornadas para el final del campeonato y el equipo ubicado en puestos de descenso.
Se trata de una solución de la casa y motivada por las circunstancias. La elección de Torres era Bordalás pero la negativa de éste, hizo que, finalmente, Reyes se convirtiera en el nuevo entrenador getafense.
Hasta ahora, este gijonés, de 44 años, había desempeñado sus funciones en la dirección deportiva del club. Un departamento, por cierto, que no tuvo nunca buena sintonía con Sánchez Flores. Ya en verano, Quique le presentó al Director General, Ramón Planes y al propio Reyes su informe para el nuevo curso y de lo allí expuesto a lo que finalmente se plasmó en la confección de la plantilla de la actual temporada, había un abismo.
Sin experiencia en los banquillos
Reyes, apenas ha estrenado su currículum como entrenador de élite. No ha dirigido un solo encuentro en Primera División. Obtuvo el carné y se incorporó como técnico y analista del Rayo Vallecano, hace seis años. Posteriormente, trabajó en el Real Oviedo. Allí ejerció las labores de planificación del área deportiva en la temporada 21-22 y el pasado verano firmó con el Getafe.
Como futbolista militó en las filas del Oviedo, Villarreal, Getafe, Albacete, Pontevedra, Rayo Vallecano, Palencia y Alcobendas.
Próximo partido
Tras colgar las botas, se preparó en la Real Federación Madrileña de Fútbol como entrenador pero también como director deportivo y técnico en psicología y coaching deportivo. Ahora va a tener la oportunidad de desplegar en un banquillo de Primera División muchos de esos conocimientos adquiridos. Tiene ante él, un gran reto: salvar al Getafe del descenso.