Los problemas físicos de Alexis Sánchez y la guerra Rueda-Inter no tuvieron final feliz: el tocopillano se quedó en el banco de suplentes en el Chile - Perú, tercero de los partidos de las selecciones sudamericanas en las Eliminatorias rumbo a Qatar.
Es que tras no completar la práctica del miércoles y evaluarse en Clínica MEDS el jueves -con el "ojalá lo hubieran cuidado como lo cuidamos nosotros" del cafetero al Nerazzurri en medio de ambos hitos- la decisión del departamento médico de La Roja fue no arriesgar a su valor más de la cuenta.
Es que pese a que el jefe del cuerpo técnico aclaró que no hay gravedad en las molestias musculares del 7, y descartó alguna lesión en puntual, la capacidad de Sánchez Sánchez no es el 100% y debe llevarse con cuidado toda participación en la doble fecha ante el Rímac y Venezuela. Sus minutos son trabajados con reloj -jugó 7' contra el Rímac- y circunstancias en mano.
Con el 2-0 en la mano, Sánchez entró por un buen Felipe Mora en el minuto 83. Y apenas ingresó se acomodó en la izquierda del ataque y sacó un potente disparo a quemarropa que atajó Pedro Gallese in extremis. Poco más pudo aportar en el trascendental triunfo de Chile pero sí arrastró marcas, acertó tres pases y cometió dos faltas. Mejoró a un todavía notable Jean Meneses y batalló arriba hasta el término y afinó sus piernas y pegada para el viaje a Venezuela.
