Aplaudan, aplaudan, no dejen de aplaudir, a los pibes de Boca que tuvieron que dar la cara en el Florencio Sola. Con 10 jugadores que habían salido a la cancha 24 horas antes, nueve debutantes -ocho de manera absoluta en Primera-, y uno infiltrado, el Xeneize se llevó un empate ante Banfield que vale mucho más que un mero punto: vale el respeto del fútbol argentino, de los propios y de los extraños.
LAS MEJORES JUGADAS DEL EMPATE EN EL SUR
Y es que seguramente más de un directivo querrá, ahora, colgarse la medalla que solo le corresponde a los 15 chicos que debieron afrontar una situación inesperada cuando, en realidad, debieran hacer una profunda autocrítica sobre su accionar en los últimos días: la batalla pública por intermedio de comunicados con la LPF y el Gobierno Nacional no representó a nadie y quedó muy lejos de "presionar" a alguien.
"Tinelli me dijo que íbamos a poder jugar con los titulares si presentábamos los PCRs negativos", dijo Juan Román Riquelme en la previa del partido. Echarle la culpa al presidente de la LPF no exime de responsabilidad al Consejo de Fútbol, que debió haber sido mucho más previsor: ¿cómo a nadie se le ocurrió un escenario en el que iba a tener que jugar la Reserva? Con la negativa de postergar el encuentro del sábado por la noche, ¿no podía aplazarse el del viernes por la mañana? ¿Alguien lo pensó, aunque sea?
Que los juveniles hayan terminado acalambrados también es una falta de los dirigentes de la institución. Ni hablar de que tendrán que volver a presentarse en menos de 72 horas con San Lorenzo, en lo que serán tres partidos en cinco días. Ni siquiera "los profesionales" afrontar semejante carga. Cuidar a los chicos no era, necesariamente, que no jueguen por urgencia: era que puedan hacerlo en las mejores condiciones posibles. Todavía están a tiempo de intentar resolver ese problema.
El casi seguro desgarro de Almirón, el sacrificio de un lesionado Mancuso en los minutos finales, la clase de Taborda, Barco y Vega, la personalidad de Lastra, el ímpetu de Bodencer... Los pibes mostraron cómo hay que defender a Boca. Lo demás es cotillón.
