Zidane estaba contra las cuerdas tras sumar cuatro pinchazos en cinco partidos que le alejaron de las posiciones de cabeza de la Liga y le dejaron al borde del KO en la Champions. Fue entonces cuando el entrenador del Real Madrid tiró de una vieja fórmula para recurrir a su vieja guardia y exprimirla para el resurgir de su equipo.
Aún consciente que esos jugadores no son precisamente jóvenes y que hay acumulación de partidos en un calendario apretado, les fue dando titularidad tras titularidad hasta revertir la situación y encadenar seis triunfos seguidos con los que meterse (y como primero) en octavos de la Champions League y colocarse colíderes de la Liga.
Courtois, intocable
El belga ha recuperado su estado de forma, ese con el que conquistó el Zamora la pasada temporada y es inamovible en la portería. De momento ni Lunin ni Altube saben lo que es defender la portería blanca en detrimento de un Courtois inconmensurable y que solo ha encajado dos goles en esos seis últimos partidos.
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Defensa inamovible con un Marcelo desaparecido
Carvajal, Varane, Ramos y Mendy. Esa es la defensa que ha conformado Zidane para formar un muro defensivo alrededor de Courtois.
Salvo Carvajal y Ramos, que se perdieron las dos primeras citas por lesiones y que fueron suplidos por Lucas Vázquez y Nacho, el resto han jugado todo. De hecho Marcelo suma siete convocatorias sin tener minutos y Militao, por el que pagó el Real Madrid 50 millones, apenas ha jugado tres partidos y no juega desde el 31 de octubre. Odriozola, solo ha jugado un partido esta temporada y está inédito desde su lesión.
Getty ImagesUn centro del campo a recitar de memoria
Modric, Casemiro y Kroos son los viejos rockeros a los que ha acudido Zidane para adueñarse del balón y canalizar el juego. Los cuatro primeros partidos ante Sevilla, Gladbach y Atlético de Madrid lo jugaron entero (solo Modric descanso 2 minutos).
El alemán ha disputado los seis encuentros por completo, mientras que Casemiro ha jugado los 90 minutos de cinco de los seis partidos (el otro, ante el Athletic, se lo perdió por sanción) aportando además dos goles. El croata, quien va a renovar con el Madrid, solo se ha perdido un encuentro por lesión y a sus 35 años sigue siendo pieza capital.
Valverde ha cubierto las bajas por sanción y lesión respectivamente de Casemiro y Modric mientras que el resto de los centrocampistas de Zidane apenas han gozado de protagonismo. De hecho el efecto Odegaard se ha disipado mientras que Isco apenas cuenta y busca salida.
GettyLucas Vázquez y Benzema, puntas de lanza en su tridente de ataque
Lucas Vázquez, antiguo jugador número 12 en las tres Champions de Zidane, pero desaparecido la última temporada, ha pasado del ostracismo a la titularidad indiscutible. Formó parte del once inicial en los seis encuentros y solo descansó 15 y 12 minutos respectivamente frente a Athletic y Eibar. Benzema ha sido indiscutible jugando los 540 minutos de los seis encuentros donde además ha logrado seis dianas.
El tercero en discordia del tridente se lo han ido alternando varios jugadores y es donde más dudas tiene Zidane. Vinicius, Asensio y Rodrygo se han repartido las titularidades, pero bien por falta de rendimiento o por lesión, lo cierto es que no han terminado de consolidarse. En teoría esa tercera pata del tridente es para Hazard una vez se recupere del todo de su lesión. Mariano y Jovic no cuentan para Zizou pese a apariciones espontáneas y se le busca salida.
Getty ImagesUn once titular cuya edad media de edad roza los 30 años
Ramos, Kroos, Modric, Benzema pasan los 30 años, mientras que Courtois, Carvajal, Varane, Casemiro y Lucas Vázquez se acercan a la frontera. Eso deja a Mendy (25 años) como el único miembros del once fijo de Zidane con una edad para acumular partidos en una temporada larga y donde el Madrid jugará seis partidos en apenas un mes y donde la fórmula de Zidane, que tan buenos éxitos le ha dado, puede saltar por los aires. El tiempo dará o quitará la razón a un técnico que ha hecho recuperado una frase tan antigua como el fútbol “el once titular” y que choca en estos tiempos de plantillas largas y donde una palabra parece imponerse por momentos, “rotaciones”.
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