El Real Madrid pasa uno de los peores momentos de la segunda etapa de Carlo Ancelotti en el banquillo. Los merengues han perdido el liderato en LaLiga y acaban de caer ante el Barcelona en la final de la Supercopa de España 2023.
El curso pasado, los blancos cimentaron su éxito en LaLiga por el dominio de las áreas y, especialmente, del área propia. Thibaut Courtois firmó una temporada excepcional pero también Militao y David Alaba en el centro de la defensa haciendo olvidar al mismísimo Sergio Ramos.
Sin embargo, los blancos han perdido el dominio de su área. Los números son claros, el curso pasado los blancos dejaron su puerta a cero en 22 de los 58 partidos que jugaron lo que supone un 37% de los encuentros sin encajar. Este curso suman 7 en 26 encuentros oficiales lo que supone un 27% y esta tendencia se ha recrudecido en los últimos compromisos.
En sus últimos 10 partidos oficiales, sólo han dejado la portería imbatida en dos partidos y uno fue ante el Cacereño en la Copa del Rey y otro ante el Valladolid, donde Thibaut Courtois estuvo sobresaliente bajo palos.
A pesar de que Karim Benzema y Vinicius no están viendo puerta con facilidad, los blancos sí mantienen unos números ofensivos destacables con 56 goles en 26 partidos, una media de 2,15 goles por encuentro y es similar a la del curso pasado cuando marcaron 119 en 56 encuentros, una media de 2,12 tantos por partido.
En la misma muestra de los últimos 10 partidos la media de gol por partido ha descendido ligeramente a 1,8 por encuentro pero sigue siendo una media aceptable que hace ver que el gran problema es que en esta última mala racha de partidos suma una media de 1,5 goles en contra por partido cuando su media del curso pasado era de 0,89 por partido. La recuperación de Alaba debe unirse a una subida del nivel de Rudiger, Carvajal y Mendy para que el 0 vuelve a ser recurrente en los marcadores del Real Madrid.