El partido entre Boca y Atlético Mineiro en la Bombonera, por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores, no regaló emociones, pero sí una gran polémica que tuvo al VAR y al árbitro Andrés Rojas como principales protagonistas.
Otro papelón del VAR en la Copa Libertadores
A los 34', una serie de errores increíbles de los defensores brasileños le permitieron a Diego González cabecear solo al lado del arco por encima del arquero y, así, poner el 1-0 para el local. Pero la tecnología (o mejor dicho, quienes la manejan) volvió a hacer de las suyas: después de demorar una eternidad en revisar la acción, y tras varias protestas encabezadas por Nacho Fernández, el juez Rojas se apoyó en el VAR para invalidar el tanto.
Menos de 24 horas después, la CONMEBOL dio a conocer los audios de los árbitros durante la revisión de la jugada y, al revés de lo que se esperaba, la polémica se hizo más grande ya que, contrario a lo que indica el reglamento, Rojas terminó aceptando el pedido de los futbolistas del Mineiro de ir al VAR.
"El árbitro no observa durante una acción de gol ninguna infracción. El VAR, al revisar la imagen, le sugiere una revisión de campo. El árbitro, al chequear la jugada, interpreta una posible infracción cambiando su decisión inicial", explica brevemente el locutor del video, que en su primera parte muestra cómo los árbitros revisaban una posible falta del Pulpo González al momento de convertir el gol.
Tras repasar varias veces la acción del cabezazo y descartar una falta, la revisión se centra en el contacto de Norberto Briasco con Nathan Silva. "Es un contacto pequeño, un contacto muy pequeño", es lo primero que dice el encargado del VAR, el paraguayo Derlis López. "Lo puede llegar a desestabilizar", le responde el uruguayo Daniel Fedorczuk, Asistente del VAR. "¿Sí?", le repregunta López, a lo que el Asistente le propone: "Que interprete el árbitro".
Ya con Rojas revisando el monitor, se observa tanto a Nacho Fernández como a otros jugadores del Galo mirando las imágenes a la par del árbitro y continuando su protesta a los gritos, cuando el reglamento claramente dice que no pueden ubicarse en ese lugar.
Poco después de conocerse públicamente las grabaciones, la CONMEBOL decidió suspender tanto a Rojas como a López. "Sus actuaciones han sido analizadas técnicamente por esta Comisión de Árbitros, concluyendo que los mismos han incurrido en errores graves en el ejercicio de sus funciones en el desarrollo del partido, puntualmente en la anulación del gol del club Boca Juniors a los 34", explica el comunicado.