Tras la trágica pérdida en Liverpool, el entrenador Arne Slot expresó: "El impacto para nosotros como club es absoluto. Diogo no era solo un jugador", dijo. "Era querido por todos. Fue compañero, colega y amigo, y en todos esos roles fue muy especial. Podría hablar mucho sobre lo que aportó al equipo, pero la verdad es que cualquiera que lo vio jugar lo entendía: trabajo duro, entrega, compromiso, gran calidad y goles. La esencia misma de lo que significa ser un jugador de Liverpool."