La defensa del Barcelona solía ser su punto fuerte. Esta temporada, sin embargo, es quizás su debilidad más evidente, algo resumido en una miserable actuación en la derrota por 4-1 en la final de la Supercopa de España ante el Real Madrid. Ronald Araujo, inusualmente, fue el principal culpable, cometiendo un penalti innecesario y siendo expulsado para concluir una noche desastrosa para los blaugrana.
El Barça tuvo una primera mitad catastrófica, ya que su línea defensiva sufrió demasiado contra un rápido ataque del Madrid. Los Blancos se aprovecharon, ya que Vincius Jr anotó dos veces en menos de dos minutos, ambos goles tras simples pases detrás de la defensa del Barcelona.
El equipo de Xavi ofreció una especie de respuesta. Ferran Torres disparó al travesaño antes de forzar a Andriy Lunin a realizar dos buenas paradas. Robert Lewandowski anotó después de media hora, lanzando una volea que superó a Lunin desde el borde del área.
Pero sus problemas defensivos volvieron a aparecer y fue Araujo quien tuvo la culpa del tercero, derribando a Vinicius dentro del área. El penalti, metido en la esquina inferior, fue una formalidad ya que el delantero brasileño completó su hat-trick antes del descanso.
Las cosas no mejoraron después del descanso, ya que Jules Kounde fue superado para que Rodrygo metiera el balón en la esquina inferior para tomar una ventaja de 4-1.
Araujo puso punto final a la catástrofe, golpeando a Vinicius por detrás y ganándose una segunda amonestación tonta, a pesar de sus protestas. El Barça simplemente perseguía sombras a medida que pasaban los minutos, mientras que Xavi tenía un semblante desencajado, mientras veía a su equipo destrozado por una derrota contundente.
GOAL califica a los jugadores del Barcelona desde el Estadio Al-Awwal de Riad...