El Rondo: Lionel Messi y Son Heung-Min se roban el show - ¿quién llegará más lejos en los playoffs de la MLS?

Tom Hindle: Lo he dicho muchas veces aquí: no será Inter Miami. Tienen defectos. No son el equipo que muchos imaginan. Hay debilidades en varias posiciones clave. Pero también tienen a un tal Lionel Messi. Así que, sí, Miami sigue siendo el favorito. Aun así, una mención especial para el equipo de expansión San Diego FC, que podría aprovechar un camino más accesible por el Oeste y llegar con frescura a un duelo decisivo.

Alex Labidou: Para mí, el favorito es FC Cincinnati. Sé que es la respuesta más “aburrida”, la versión MLS de los San Antonio Spurs, mientras que la mayoría de los aficionados preferirían ver a la versión futbolera del Miami Heat: Messi e Inter Miami. Pero los Herons tienen vacíos preocupantes en su plantilla. Este es un equipo que sufre al defender los contraataques y que depende de que Messi marque dos goles por partido para ganar.
Cincinnati, en cambio, ha estado construyendo este proyecto de manera silenciosa durante las últimas tres temporadas. Evander es uno de los cinco mejores jugadores de la liga, Kevin Denkey está firmando una primera temporada sobresaliente, y Miles Robinson atraviesa su mejor momento. Cincy tiene todos los ingredientes para coronarse este año.

Ryan Tolmich: Engáñame una vez, vergüenza para ti. Engáñame dos veces, vergüenza para mí. Pero… ¿una tercera? A pesar de todos sus defectos —que no son pocos—, parece que las estrellas se están alineando para Inter Miami, especialmente tras el cierre de temporada de Messi. Si mantiene ese nivel, el resto de la liga está en problemas.
La gran incógnita sigue siendo la defensa: ¿podrán resistir? Si consiguen limitar los daños y solo encajan uno o dos goles por partido, los Herons tienen una oportunidad real de hacer, por fin, esa ansiada carrera por el título.

Tom Hindle: La belleza de los playoffs de la MLS es que, salvo una situación tipo primero contra octavo —hola, Miami—, las sorpresas no suelen ser tan comunes. Aun así, LAFC podría tener un desafío interesante. En ataque son demoledores, con Son Heung-Min liderando la línea, pero Austin FC puede ser un rival incómodo. Ojo con ese duelo.

Alex Labidou: Tan tentador como es elegir a Inter Miami, el sentido común dice que, como mínimo, llegarán a semifinales. Así que me quedo con Minnesota United, que enfrenta la difícil misión de medirse a los Seattle Sounders de Brian Schmetzer. Sí, apostar por el quinto sembrado sobre el cuarto no es precisamente una locura, pero los dos primeros parecen bastante a salvo de una gran sorpresa.
Los Loons han mostrado, por momentos, el nivel de un candidato serio al título, aunque su irregularidad ofensiva los ha frenado. Schmetzer, en cambio, es un técnico curtido en batallas, experto en partidos de eliminación. Con Jordan Morris recuperado, los Sounders tienen lo necesario para avanzar a semifinales.

Ryan Tolmich: No sé si califica como una “alerta de sorpresa”, pero lo siento por San Diego FC. Su historia de expansión es fantástica, pero el panorama está por volverse complicado. Tal vez no caigan en la primera ronda, siendo líderes de la Conferencia Oeste en temporada regular, pero tarde o temprano se cruzarán con una superestrella. Y eso podría ser demasiado para ellos. Aun así, el club debería sentirse orgulloso: pase lo que pase, ha sido una temporada notable en medio del caos habitual de la postemporada.

Tom Hindle: ¿Alguien en particular? Difícil de decir. Nadie quiere quedarse corto en este punto de la temporada, y prácticamente cualquier entrenador que no cumpla con las expectativas podría estar en problemas. El caso más evidente es Javier Mascherano, en Inter Miami, sobre todo considerando que su nombramiento se percibe como una movida basada más en su amistad con Messi que en méritos propios.

Alex Labidou: Coincido: Mascherano está bajo mucha presión, aunque su relación con Messi probablemente le garantice al menos una temporada más, especialmente con el equipo en plena reestructuración. Pero si hablamos del “asiento más caliente”, me inclino por Phil Neville. En sus dos años al mando de Portland Timbers, todavía es difícil descifrar qué clase de equipo son. Llegaron a estar bien posicionados a mitad de temporada, y pese a ser una de las mejores defensas de la liga, su inconsistencia es frustrante.
El año pasado fueron humillados por los Vancouver Whitecaps en la repesca. Si vuelven a caer temprano, los aficionados de Portland tendrían razones de sobra para cuestionar su continuidad.

Ryan Tolmich: En realidad, diría que ninguno. Hoy es más fácil llegar a los playoffs, sí, pero ese sigue siendo el objetivo principal en la MLS. Tal vez un colapso escandaloso de Inter Miami pondría en duda a Mascherano, pero este es un equipo en transición. Lo mismo aplica para LAFC, aunque ya se sabe que Steve Cherundolo está encaminado a salir.
En general, la postemporada reúne a clubes que cumplieron con lo esperado y a grandes equipos con circunstancias atenuantes. Por eso, los asientos no están tan calientes como parecen.

Tom Hindle: Me quedo con Messi, aunque solo sea porque Inter Miami parece destinado a ganarlo todo. Tal vez tengan que superar a Vancouver o LAFC en la final, pero con Messi en ese nivel, cuesta apostar en su contra.

Alex Labidou: Esta es difícil, pero voy con Thomas Müller. Ha sido una temporada transformadora para Vancouver Whitecaps, un club que hasta hace poco tenía uno de los valores de franquicia más bajos de la liga y cuyo mercado temía una posible reubicación. Ahora están entre los cuatro mejores récords de la MLS, guiados por una exsuperestrella del Bayern Múnich.
A menudo se critica a la liga por restarle importancia a la temporada regular, pero aquí se ve su lado positivo: los contendientes pueden surgir desde cualquier rincón. No sería sorpresa si Vancouver termina representando al Oeste en la MLS Cup.

Ryan Tolmich: Messi, porque… bueno, es Messi. De los tres, Müller quizás tenga el equipo más completo, mientras que Son Heung-Min cuenta con el mejor socio posible en Denis Bouanga. Pero, ¿basta eso para compensar tener al astro argentino en el otro lado? Los tres podrían tener buenas rachas, sin duda. Sin embargo, Messi y Miami ya saben lo que es recorrer este camino. Y el argentino parece decidido a no dejar que su equipo vuelva a fallar.

Tom Hindle: Es difícil de evaluar. Messi ha hecho cosas increíbles, pero Inter Miami como equipo no ha sido consistentemente brillante. Es como si Kylian Mbappé anotara 40 goles para el Real Madrid, pero el equipo no ganara títulos. Si Miami gana la MLS Cup, entonces se puede argumentar que Messi fue el mejor jugador del mejor equipo. De lo contrario, esta es una temporada brillante, pero más individual que colectiva.

Alex Labidou: Una observación polémica: esta temporada de Messi es apenas la segunda de sus tres en la MLS, con estadísticas beneficiadas por la disponibilidad de partidos. La pasada campaña fue incluso más impresionante, sobre todo al inicio de 2024, cuando era pura electricidad.
Con 29 goles y 19 asistencias en 28 partidos, los números son extraordinarios y probablemente lo lleven a ganar otro MVP. Pero el año pasado registró 20 goles y 16 asistencias en 19 partidos, cifras que hablan por sí solas.

Ryan Tolmich: Está cerca de la cima histórica. No se puede pasar por alto a jugadores como Carlos Vela o Sebastián Giovinco, quienes fueron absolutamente dominantes en sus mejores temporadas en la MLS. Messi también ha sido dominante, pero se perdió varios partidos. Si hubiera estado al 100% todo el tiempo, sus números serían aún más impresionantes. Así que, por ahora, situamos esta temporada entre las cinco mejores de la liga, a menos que gane la MLS Cup.