Más que un mercado de reparación, el realizado en esta sesión por el Milan ha sido el mercado de la revolución.
El club rossonero, en parte desmintiendo las elecciones realizadas hace solo unos meses (de Emerson Royal a Morata) ha intervenido fuertemente para regalarle a Sergio Conceiçao una plantilla capaz de luchar por el cuarto puesto.
Demasiado importante, por otro lado, asegurar al menos la clasificación para la próxima Liga de Campeones, tanto desde el punto de vista deportivo como económico.
Así es como en el último día de negociaciones en Milanello llegaron otros tres rostros nuevos, entre los que destaca seguramente Joao Felix.


