Raphinha ahora sí juega como si costara 60 millones de euros: no hay mejor momento para que el Barcelona saque provecho y venda al brasileño este verano

Joan Laporta no dudó en elogiar a Raphinha cuando el brasileño fichó en 2022 y dijo a la prensa: "En las épocas doradas del club, siempre hubo brasileños. Él lleva el testigo de la ilusión y la magia. Desde el club pensamos que vuelve el deporte rey. Es Xavi quien le ha querido, ha insistido mucho y el club ha hecho todo lo posible".

Raphinha recibió ofertas de otros lugares, especialmente de Arsenal y Chelsea, pero rechazó a ambos y aterrizó en el Camp Nou. Y aunque las palabras de Laporta pueden haber sido elevadas, hizo lo suficiente en sus dos temporadas en el Leeds United para generar entusiasmo entre los aficionados blaugrana.

El extremo fue una parte clave del equipo de Marcelo Bielsa que se ganó la admiración del resto del fútbol inglés en la campaña 2020-21, ya que terminó en la mitad superior de la Premier League como club recién ascendido.

Fue aún mejor el año siguiente, su ímpetu ofensivo y su creatividad resultaron cruciales cuando el Leeds de Jesse Marsch evitó por poco el descenso después de que una mala racha a mitad de temporada provocara el despido de Bielsa.

El Leeds no quería perder a su mejor jugador, pero Raphinha quería irse y el Barça estaba dispuesto a pagar.

En su rueda de prensa de presentación, Raphinha también se mostró convencido de que podría triunfar en Catalunya: "Para mí es un orgullo enorme estar aquí, quiero agradecer a todos. Tengo muchos ídolos que han pasado por aquí y han hecho historia. Si consigo hacer la mitad que ellos, ya haré mucho. Es mi sueño de niño, de mi familia también. Voy a dar lo mejor de mí por el Barça".

Pero había algo más. Las finanzas blaugrana eran tales que a Raphinha le entregaron una camiseta sin nombre ni número por problemas de registro. Mientras tanto, corría el rumor de que se suponía que sería un reemplazo para Ousmane Dembélé.

Xavi insistió en que quería conservar a ambos, con la esperanza de generar competencia por los puestos titulares en un equipo que ciertamente tenía pocos extremos. De cualquier manera, Raphinha estaría dando un paso adelante en calidad.

Puede que el Leeds haya sido un equipo emocionante y ofensivo, pero este era un Barça que se esperaba que compitiera por La Liga, y reestructurado a través de una especie de engaño financiero que le obligaba a ganar

Raphinha no tuvo una mala primera temporada en el Barça, pero tampoco llegó a asentarse. Dembélé no lo ayudó. El Barça de Xavi estaba en marcha y el resurgimiento de Dembélé significó que Raphinha rara vez tuviera oportunidades de impresionar en su posición preferida, la derecha.

Logró seis goles antes de la Copa del Mundo, pero entraba y salía flotando de la alineación y parecía incómodo jugando fuera de posición, por la izquierda. Tuvo la oportunidad de impresionar cuando Dembélé sufrió una lesión muscular en la segunda mitad de la campaña, pero fue inconsistente durante ese período.

Los goles de Robert Lewandowski se agotaron cuando Raphinha entró en el equipo, y el Barça ciertamente careció de la velocidad por banda que el brasileño debía proporcionar.

No fue una vergüenza que Raphinha terminara una campaña liguera con siete goles y siete asistencias, pero considerando lo mucho que el Barça había pagado y luchado para ficharlo, muchos se sintieron decepcionados.

Sin embargo, la salida de Dembélé para unirse al PSG en el verano de 2023 debería haberle brindado a Raphinha la oportunidad que necesitaba de jugar más minutos y finalmente mostrar su verdadero potencial.

En cambio, fue expulsado en el partido inaugural de la temporada del Barça contra Getafe, y luego sufrió una lesión muscular que le permitió al adolescente prodigio Lamine Yamal ponerse en su lugar y demostrar exactamente por qué era tan considerado dentro de La Masia.

Sin embargo, las cosas han cambiado recientemente para Raphinha. Todo comenzó con Xavi, quien de manera constante hizo que el brasileño regresara al equipo a principios de 2024 para permitir que las jóvenes piernas de Yamal descansaran.

Desde mediados de febrero, el brasileño ha sido un colaborador clave, siendo titular en siete partidos consecutivos, y ha participado directamente en ocho goles en ese lapso.

Su doblete contra el PSG puede haber sido la actuación más relevante, pero Raphinha ha impresionado en los últimos dos meses. Fue vital ante el Getafe, anotando y asistiendo en su primera apertura como titular en más de un mes, mientras que también fue crucial para la victoria de los blaugrana en octavos de final sobre el Napoli en la Liga de Campeones, brindando dos asistencias.

Desde entonces han seguido otros momentos destacados, incluida una asistencia en una cómoda victoria sobre el Atlético de Madrid y el gol decisivo en la victoria de los blaugrana sobre Las Palmas. El verdadero Raphinha finalmente había llegado.

Pero este podría no ser el mejor momento para que se produzca el resurgimiento de Raphinha, al menos si quiere quedarse más allá de este verano. De hecho, el brasileño está empezando a justificar su precio, pero el mismo movimiento de palanca que le permitió fichar por el club en 2022 ahora ha obligado al Barça a tomar algunas decisiones financieras complicadas antes del verano.

La Liga ha reducido aún más el límite de gasto del Barça de cara a la próxima temporada. Su plantilla es ahora el doble de cara de lo que debería ser, lo que limita su poder adquisitivo en los próximos meses. No es tan simple como "vender para comprar", pero el Barça ciertamente necesita sacar algo de efectivo, y también ganar algo de dinero con las ventas de jugadores, si quiere fortalecerse en la pretemporada.

Eso los deja con una especie de dilema, especialmente teniendo en cuenta que tienen relativamente pocos activos que les proporcionen una buena rentabilidad y que también valga la pena vender.

La nueva ola de talentos de La Masia debería ser intocable, mientras que por veteranos como Robert Lewandowski e Ilkay Gundogan no obtendrán mucho dinero. Raphinha, sin embargo, tiene 27 años y está empezando a demostrar que puede ser un jugador clave para un equipo que quiere la Liga de Campeones. Esas no son características que aparecen en el mercado con mucha frecuencia.

La aparición de Lamine Yamal también ha complicado aún más las cosas para Raphinha. La etiqueta de 'nuevo Messi' es injusta para el adolescente, sobre todo porque Yamal realmente no juega como el ocho veces ganador del Balón de Oro, pero el Barça no ha graduado de su academia a un talento electrizante de su molde en años.

Es peligroso acumular expectativas sobre jugadores tan jóvenes, pero basta con ver cinco minutos de Yamal para saber que es especial. Aquí hay un verdadero potencial de clase mundial, si es que no lo está ya. Y el joven de 16 años, que batió récords, quiere complicarle la vida a Raphinha.

Yamal simplemente tiene que jugar y necesita operar en la banda derecha para dar lo mejor de sí. No se puede abusar de un jugador tan bueno y tan joven ni pedirle que haga algo en lo que no es bueno. Raphinha, entonces, es quien tiene que adaptarse, y así lo ha hecho últimamente.

Xavi utilizó a Raphinha como número 10 avanzado en algunas ocasiones, e incluso lo cambió a la banda izquierda para acomodar a Yamal. Su mejor posición, sin embargo, sigue siendo atacar por la derecha. El problema es que el Barça busca tener a alguien mejor y más joven que el brasileño haciendo ese trabajo.

Raphinha podría ser un jugador de impacto para el nuevo entrenador del Barça la próxima temporada. En cualquier circunstancia normal, el club haría bien en conservar a Raphinha. Después de todo, los jugadores atacantes de primer nivel no son fáciles de conseguir.

Cualquiera que sea lo suficientemente bueno como para jugar en el Barça, y ganar partidos al hacerlo, vale la pena conservarlo. Pero esto ya no es una decisión futbolística y el Barça tiene que pensar de forma práctica. Están en un punto de pellizcar céntimos y exprimiendo hasta el último valor que tienen de su equipo defectuoso pero talentoso.

Una mirada a las cuentas, un vistazo al equipo y la aceptación de la realidad sugieren que Raphinha es, en última instancia, y desafortunadamente para él, prescindible.

El Barça es el club de sus sueños y apenas acaba de empezar a ser una estrella para ellos. Pero este es un sistema cruel, y con cada gol de la victoria, Raphinha aumenta las posibilidades del Barcelona esta temporada, pero también su oportunidad de equilibrar las cuentas este verano.