Gol en el debut contra Argentinos, otro ante Barracas Central, hattrick frente a Vélez, uno más ante Excursionistas en la Copa Argentina y de nuevo grito frente a Riestra. Siete goles en cinco partidos y gestos que valen oro, como las palabras al oído durante el abrazo con Ian Subiabre, que lo reemplazó ante el Fortín, con el partido 5-0.
Demichelis apostó y Borja cumplió. Hoy no existe discusión en torno a su titularidad y es de los inamovibles, después de aquel emoji en una historia de Instagram, cuando fue al banco ante Rosario Central en la fase regular de la Copa LPF 2023, claramente enojado con la decisión de no jugar desde el arranque.
Hablando la gente se entiende, dice un viejo refrán. Y cuando Demichelis y Borja aclararon la situación, el verdadero ganador fue River.