La última de esas victorias, registrada en un abarrotado San Siro, fue particularmente impresionante. Italia merecidamente lideró al descanso gracias a un ingenioso remate de Francesco Pio Esposito, pero Noruega estalló en vida en la segunda mitad y ofreció una clínica de fútbol ofensivo para deslumbrar a los anfitriones, con goles de Antonio Nusa y Jorgen Strand Larsen en ambos lados de un doblete de Haaland.
Debe señalarse que Italia ya no es la fuerza de antes, pero se han realizado mejoras constantes bajo el nuevo entrenador Gennaro Gattuso, y cinco miembros de su equipo ganador de la Eurocopa 2020 - Gianluigi Donnarumma, Nicolo Barella, Giovanni Di Lorenzo, Alessandro Bastoni y Manuel Locatelli - comenzaron el partido. Noruega es solo el segundo equipo en derrotar a Italia en un partido competitivo fuera de casa por tres goles o más; Suecia fue el último en lograr esa hazaña en 1983.
También se vengaron de Italia por su derrota en octavos de final en la Copa del Mundo de 1998. Los resultados contundentes no son mucho más importantes que este, y uno tendría que imaginar que Haaland ahora está revisando sus expectativas para el próximo verano.
El talismán del Manchester City está liderando una generación dorada de talento que no debería temer a nadie. Toda la evidencia de una impresionante campaña de clasificación apunta a una verdad innegable: Noruega es un serio contendiente para la gloria en la Copa del Mundo, y no solo porque pueden contar con el mejor delantero del momento...






