Marco Reus, el futbolista más desafortunado de Europa, se merece un final de cuento de hadas en la Champions League con el Borussia Dortmud

Cuando se trata de Reus, hay una tentación comprensible de enfocarse en los aspectos negativos. Su nombre se ha vuelto sinónimo de mala suerte. Para algunos, es el gran talento no realizado, un futbolista fantástico que de manera cruel no ha podido explotar todo su potencial por un duro revés tras otro.

Hace una década había pocos mediocampistas ofensivos más emocionantes en el fútbol mundial. Durante la carrera del Dortmund hacia la final de la Liga de Campeones 2012-13 estuvo directamente involucrado en ocho goles y hasta le cometieron un penal en la derrota 2-1 contra el Bayern Munich en el partido decisivo. En total, en aquel curso marcó 19 veces en todas las competiciones. Demostró ser aún más prolífico la temporada siguiente, con 23 goles en 44 partidos, además de proporcionar más asistencias que cualquier otro jugador en la Bundesliga. Simplemente, no había un jugador mejor en Alemania en ese momento.

"Tengo una opinión de él muy, muy alta", dijo el legendario Franz Beckenbauer a principios de 2014. "Reus va a ser la próxima superestrella del fútbol, esa es mi opinión. Realmente es divertido verle jugar".

La Copa del Mundo de 2014 debería haber sido el torneo definitorio en la carrera de Reus. Tenía 24 años y estaba jugando en la cima de sus habilidades para uno de los equipos más fuertes del fútbol internacional.

Sin embargo, mientras Mario Götze, su gran amigo y excompañero de equipo en el Dortmund, terminó anotando el gol de la victoria en la final en Río contra Argentina, Reus no pudo hacer una sola aparición en el certamen disputado en Brasil, tras sufrir una lesión de tobillo en el último partido de preparación de Alemania, contra Armenia.

Un devastado Reus declaró: "El sueño se destrozó de un momento a otro." Y no sería la última vez.

Solo dos años después de la amarga decepción de perderse el Mundial 2014, Reus fue excluido de la convocatoria germana para la Eurocopa 2016 después de no recuperarse a tiempo de una lesión en la ingle. El entrenador Joachim Löw lamentó: "Marco tiene problemas serios de condición física".

Siempre ha sido el tema predominante en la carrera de Reus, al punto tal que el propio atacante llegó a admitir: "Renunciaría a todo mi dinero para estar lo suficientemente sano como para hacer mi trabajo."

Reus sí logró estar disponible para la Copa del Mundo de Rusia en 2018, e incluso anotó en la victoria sobre Suecia antes de que Alemania quedara inesperadamente eliminada en fase de grupos. Sin embargo, tres años más tarde decidió bajarse de la Eurocopa 2020 (disputada en 2021) por su propia cuenta.

"Después de una temporada complicada, agotadora y, al final, exitosa, decidí, junto con Löw, no ir al Campeonato Europeo", escribió en Instagram. "Esta decisión fue muy difícil para mí porque siempre es un orgullo cuando se me permite representar a mi país. Pero después de un año muy intenso para mí personalmente y lograr mis objetivos en el BVB, tomé la decisión de darle a mi cuerpo tiempo para recuperarse".

Lamentablemente, incluso un enfoque tan sensato para cuidarse a sí mismo no logró resolver sus problemas físicos: en 2022, Reus se perdió el Mundial de Qatar por una lesión en el tobillo.

Cuando uno también considera que Reus solo tiene dos medallas de ganador de la DFB-Pokal para mostrar en su carrera, es innegablemente difícil no sentir que tal vez hubiera sido mejor para él unirse a otro club de élite cuando tuvo la oportunidad, al igual que muchos de sus antiguos compañeros de equipo, como Pierre-Emerick Aubameyang, Erling Haaland y Jude Bellingham.

Sin embargo, Reus no lo ve de esa manera. En su opinión, la vergüenza no es que se quedara, sino que tantos otros grandes jugadores se marcharan.

"Siempre he dicho que cada uno es responsable de su propia carrera. El tiempo vuela y solo tienes un poco de él", señaló. Y recordó: "Hemos tenido muchos jugadores aquí con los que podríamos haber construido un equipo fantástico, pero lamentablemente tomaron decisiones diferentes y siguieron otros caminos profesionales, algo que debe ser respetado".

En ese sentido, Reus se lamentó de lo que podría haber sido: "Para un jugador como yo, que siempre quiere competir por títulos, obviamente duele ver a los mejores jugadores dejar el club porque lamentablemente no ven que podrían dar el siguiente gran paso aquí. Pero nunca tuve la sensación de que debería seguir ese camino solo porque otros lo hicieron. Siempre estuve dispuesto a construir algo nuevo de nuevo y así enviar un mensaje a la gente: '¡Me quedo aquí pase lo que pase!'".

Todas las cosas buenas llegan a su fin y Reus dejará el Dortmund este verano. En un mundo ideal, habría terminado su carrera en el club que ha apoyado desde que era un niño, pero, a decir verdad, a esta altura eso probablemente no tenía sentido para ninguna de las partes.

Su papel bajo el mando de Edin Terzic ha disminuido lentamente durante los últimos 18 meses. Reus empezó los últimos ocho partidos de la campaña 2022-23 en el banquillo y posteriormente perdió el brazalete de capitán a manos de Emre Can durante el verano. En esta temporada, solo ha comenzado un partido durante las fases eliminatorias de la Champions League, en febrero y por los octavos de final.

Hubo momentos en los que su frustración se hizo visible. Después de todo, lo único que quería era jugar. Pero se reprendió públicamente por molestarse, enfrentó su decepción y siguió adelante, tal como siempre lo ha hecho.

Cuando el Dortmund derrotó al PSG para llegar a la final de la Liga de Campeones, nadie estaba más feliz que Reus. Solo había entrado como suplente en la segunda mitad en el Parque de los Príncipes, pero celebró enérgicamente con sus compañeros y los aficionados después.

También comenzó los últimos tres partidos de la Bundesliga del Dortmund y recibió una despedida "perfecta" en el Signal Iduna Park, con gol y asistencia en su último partido frente a la Yellow Wall, después de invitar cervezas para todos en el estadio.

Tal gesto fue típico de un hombre conocido por su trabajo de caridad, que incluso donó 500 mil euros para ayudar a sostener pequeñas empresas basadas en Dortmund para enfrentar el impacto financiero de la pandemia de coronavirus.

"Es un tipo increíble, una leyenda viviente. Siempre será uno de los jugadores a los que he admirado en mi carrera" expresó su compañero Julian Brandt.

Mientras tanto, Terzic, respaldó la afirmación de Jürgen Klopp de que no importa lo que la gente piense cuando llegas, sino cuando te vas: "La moneda que perdura para siempre es el cómo te vas. Bueno, Marco deja una historia incomparable detrás."

Pero esto todavía no ha terminado, por supuesto. En la historia de un amor de toda la vida con el BVB, hay un pequeño -pero enormemente significativo- capítulo que aún está por escribirse. La final de la Champions League del sábado es la oportunidad de Reus de tener un final de cuento de hadas, aunque él no quiere que el foco esté sobre sus espaldas. Claramente le hubiera encantado quedarse en Dortmund por una temporada más, pero ya está enormemente agradecido por la forma en que pudo despedirse de la Yellow Wall.

"Estoy completamente consciente de las decisiones que se han tomado, de que tenía que ser de esta manera. Eso significa que podemos prepararnos bien para esta próxima gran final y ojalá terminar de manera perfecta", aseguró.

Gane o pierda en Wembley, Reus claramente dejará el Borussia sin arrepentimientos: "No había motivo para hacer las cosas de manera diferente o no ser leal al club. Valió la pena hacer todos los sacrificios. Seguir adelante, mantenerse firme, nunca rendirse y siempre mantenerse positivo".

Y tal vez esa sea su legado: el ejemplo que ha dado a los demás. La mayoría de las carreras no van como se espera. Solo unos pocos afortunados ganan Copas del Mundo y Balones de Oro. Para la mayoría, el fútbol es una lucha constante.

Así que, aunque Reus puede que no haya logrado lo que se esperaba de él después de su primera aparición para Dortmund en una final de la Champions League en Wembley; el hecho de que esté de vuelta 11 años después dice todo lo que se necesita saber no solo sobre su talento natural, sino también sobre su fortaleza mental.

Como dijo una vez Matthias Sammer: "Si tomamos a Messi o Cristiano Ronaldo, quienes apenas han tenido lesiones y han jugado al fútbol a un nivel casi divino durante décadas, es maravilloso, y les tengo mucho respeto. Pero creo que las situaciones por las que ha pasado Marco son una escuela para la vida. En ese sentido, es un modelo a seguir para muchas personas. No rendirse, seguir adelante, sobrevivir a tiempos difíciles, seguir viviendo con gran estabilidad y siempre mostrar una alta motivación por el trabajo, eso es Marco Reus".

Y es precisamente por eso que su carrera en Dortmund no solo se definirá por los contratiempos que sufrió, sino por los contratiempos que superó.