Cristiano Ronaldo fue titular en los primeros tres partidos del Mundial de Qatar: jugó 88 minutos en el estreno ante Ghana (triunfo 3-2), 82' contra Uruguay (victoria 2-0) y 63' en la derrota ante Corea Corea del Sur, los partidos correspondientes a la fase de grupos.
En octavos, apenas disputó 16' en la goleada a Suiza, partido en el que su reemplazante, Gonçalo Ramos, marcó un hat-trick; Ronaldo cerró su participación en la Copa del Mundo jugando 39' en la derrota contra Marruecos 1-0 de cuartos de final.