Cuando el Manchester United finalmente tomó la decisión de mantener a Erik ten Hag, estaban ansiosos por enfatizar que la próxima temporada sería diferente al desastre de la campaña anterior.
Después de considerar varias opciones y mantener conversaciones serias con Thomas Tuchel, el United decidió que Ten Hag seguía siendo la mejor opción para el trabajo. Esto a pesar de terminar la campaña en octavo lugar, su peor posición en la Premier League, perdiendo 14 partidos y teniendo una diferencia de goles negativa.
La victoria en la final de la FA Cup sobre el Manchester City, la única derrota de los campeones en 2024, demostró que Ten Hag seguía siendo un gran entrenador, por lo que iba la lógica, mientras que hubo circunstancias atenuantes para explicar su terrible forma en la liga y el hecho de que habían sido eliminados de la Champions League y la Carabao Cup.
El peor historial de lesiones en la liga fue claramente un factor clave, pero también lo fue el hecho de que el club estaba pasando por una revisión estratégica durante la mitad de la temporada. E incluso después de que se confirmara la adquisición parcial por parte de INEOS en febrero, todavía había un período de transición, circunstancias poco ideales para trabajar.
"Nuestra revisión concluyó que Erik merece una oportunidad para mostrar de lo que es capaz dentro de la nueva estructura deportiva que estamos construyendo", explicó una fuente del club en ese momento. Sin embargo, a un mes del comienzo de la nueva temporada, parece que Ten Hag aún tiene mucha influencia en lo que sucede en Old Trafford. En lugar de que su posición se debilite por la confusión en torno a su futuro, parece fortalecido.