La lesión de Ousmane Dembélé ha pillado a todo el barcelonismo por sorpresa, incluido a su entrenador. A pesar de que se ha producido en la misma zona del infortunio que le ha mantenido cuatro meses alejado de los terrenos de juego, no se trata de una recaída. Sucede, simple y llanamente, que el francés todavía no estaba listo para ser titular aunque Valverde no esperaba perderle durante cuatro semanas más. "No he hablado con él, pero viendo el partido no pensaba que pudiera tener ninguna rotura porque le vi terminando bien" explicó antes de medirse al Espanyol.
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De todas formas Valverde suele ser pragmático. "Es lo que hay" aceptó. Mientras, toca diseñar un plan de acción para recuperar a Dembélé y, según advirtió el 'txingurri', no variará demasiado de lo que había planteado durante este mes de enero en el que ha vuelto a perderle. "Cuando un jugador tiene una lesión tan larga no puede empezar a jugar y ya está, había jugado trozos de partido y quería ir introduciéndole poco a poco y será la que tenga cuando esté recuperado" confirmó.
Tras recuperarse de su lesión, Dembélé ha participado en los cuatro partidos del Barcelona este 2018 aunque solo en el segundo, en Liga ante el Levante, fue titular. Jugó 67 minutos, además de tres ratitos más ante el Celta y la Real Sociedad, donde además sirvió una asistencia. Valverde sabía que podía volver a perderle por lesión porque tras tanto tiempo parado cuesta "poner el cuerpo en funcionamiento otra vez", especialmente en un jugador que no realizó pretemporada alguna al estar apartado por el Borussia Dortmund.
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Pero para Valverde toda adversidad supone una nueva oportunidad de mejorar. "Es simplemente una dificultad más y no tengo ninguna duda de que la va a solventar, queremos ayudarle a convertir estas lesiones en una anécdota". A fin de cuentas, con Andrés Iniesta la jugada de dosificarle en Anoeta salió bien, "porque queríamos evitar una ruptura muscular de dos meses". El francés estará fuera solo uno y podrá regresar para ejercer de revulsivo, no de titular según las palabras de Valverde, ante el Chelsea. Hasta entonces, paciencia. Y cuando regrese, también.
