Del motín a la historia: la Selección España, de una crisis a la final del Mundial femenino

Después de la Eurocopa del año pasado, en la que España sucumbió ante Inglaterra en cuartos de final, las jugadoras sintieron que se necesitaba un nuevo comienzo. “Creemos que hay aspectos internos que pueden cambiar”, explicó Irene Paredes, una de las capitanas del equipo. “Hay momentos en que hay que decir cosas, aunque no sea agradable, para que cambien”.

Contrariamente a los informes, las futbolistas insistieron en que no estaban pidiendo que el seleccionador, Jorge Vilda, fuera despedido, calificando esos rumores como “falsas filtraciones”. Sin embargo, los “sentimientos” que le dieron a conocer a la federación evidentemente no fueron tenidos en cuenta y muchas de las jugadoras se sintieron insatisfechas.

Unas semanas después, 15 jugadoras de la selección española se retiraron del combinado nacional. “Solicitábamos en nuestro comunicado enviado a la RFEF (Federación Española de Fútbol) no ser convocadas hasta que se produzcan situaciones que afecten a nuestro estado anímico y personal, a nuestro rendimiento y, en consecuencia, a los resultados de la selección y que puedan derivar en lesiones no deseadas”, se podía leer en una declaración compartida por las 15.

La RFEF devolvió el golpe, alegando que el comportamiento estaba "lejos de ser ejemplar y fuera de los valores del fútbol y el deporte". “La RFEF, contrariamente a la forma de actuar de estas jugadoras, quiere dejar claro que no les llevará a este extremo ni les presionará. Directamente, no convocará a las futbolistas que no quieran vestir la camiseta de España. La Federación solo tendrá futbolistas comprometidas, aunque tengan que jugar con jóvenes”.

Durante meses y meses, parecía que nada iba a cambiar. Vilda convocó a varias jugadoras nuevas y otras que habían estado al margen de la selección nacional. Y mal no les fue, pues perdieron solo una vez entre la Eurocopa y la Copa del Mundo.

Luego, en junio, Vilda anunció su equipo provisional para la Copa Mundial Femenina. Entre ellas estaban Aitana Bonmati, Mariona Caldentey y Ona Batlle, tres de 'las 15', así como Alexia Putellas, la dos veces ganadora del Balón de Oro que también había firmado el comunicado de sus compañeras pese a no estar disponible para la selección por aquellos tiempos. Las cuatro pasaron el corte final.

“La huelga de jugadoras fue muy difícil”, explicó Bonmati en el "Players’ Tribune". “Te pierdes partidos, dinero, patrocinadores, todo. Te matan en la prensa. Pero yo quería ser parte de eso. Sentí que la Federación Española de Fútbol necesitaba invertir más en nosotras. Ciertos cambios debían hacerse si queríamos ganar grandes torneos".

“Durante la temporada, y aquí solo puedo hablar por mí, tuve algunas reuniones con la federación. Ambas partes estuvieron de acuerdo y aceptaron que algunas cosas tenían que cambiar para que yo volviera. En ese momento tuve la esperanza de que la federación nos daría el respaldo que nos merecíamos. Y así, al final, decidí jugar esta Copa del Mundo. Estoy segura de que tomé la decisión correcta”, explicaba la estrella del Barcelona.

Mientras 'las 15' estaban fuera, las jugadoras que llamó Vilda también estaban demostrando su valía. La profundidad del talento en el fútbol femenino español es increíble, y eso se estaba demostrando.

Salma Paralluelo, la talentosa adolescente barcelonista, anotó un hat-trick en su debut. Alba Redondo, que fue la máxima goleadora de España la temporada pasada, se convirtió en una presencia más habitual en las alineaciones de La Roja. Claudia Zornoza, del Real Madrid, no paraba de crecer. En esta Copa del Mundo, esto se ha enfatizado aún más.

En ausencia de Patri Guijarro, quizás la mejor centrocampista de quite del mundo, Teresa Abelleira ha estado realmente excelente. Cata Coll, por su parte, debutó en octavos de final y ha brillado bajo palos en sus primeros tres partidos con su país en la categoría absoluta.

El hecho de que se hayan agregado varias jugadoras de clase mundial a este equipo que ya estaba funcionando solo ha reforzado sus posibilidades de la Copa del Mundo. Bonmati es la favorita para el Balón de Oro de este año; Putellas ha ganado los dos últimos; Mariona tiene uno de los mejores cerebros futbolísticos del mundo; Batlle es la mejor lateral derecha del mundo.

“Hubo algún conflicto, lo vivimos todos y nos unimos por un objetivo que es increíble”, dijo recientemente Abelleira. “Queremos ir a por todas. Está yendo bien y se ve que estamos todos súper unidos”.

Eso sí, todavía hay 12 nombres de esa lista de 15 que no están en este Mundial. Entre ellas, hay muchas que están entre las mejores del mundo. Significa que todavía hay dudas sobre si España tiene suficiente para ganar este torneo, dudas que se vieron amplificadas en la derrota por 4-0 ante Japón en la última jornada de la fase de grupos.

Ese partido demostró que este sigue siendo un equipo que puede quedar atrapado en la transición debido a debilidades en su columna vertebral. Paredes es una de las mejores centrales, pero no solo echa de menos a Guijarro delante de ella, sino también a Mapi León, de las mejores centrales del mundo.

Es justo decir que el equipo tampoco ha demostrado ser increíblemente efectivo. Con un rendimiento inferior a su xG por más de dos goles, España ha tenido 102 disparos, pero solo ha marcado 17 tantos (5 de ellos a Zambia). De los ocho países que alcanzaron los cuartos de final, ningún equipo tuvo una peor tasa de conversión.

Y luego están las preguntas sobre Alexia Putellas y cómo se ha manejado a su regreso de un largo tiempo al margen con una lesión en el ligamento cruzado anterior. Hubo que esperar hasta la mitad de la prórroga para verla contra Países Bajos, a pesar de que España necesitaba una calidad de clase mundial como la suya para ganar el partido de los cuartos de final.

Ha jugado minutos significativos desde que regresó. Pero, ¿han sido decisivos? ¿Pudieron haberlos administrado mejor? Se han visto pequeños atisbos de sus cualidades de futbolista de clase mundial en este torneo. ¿Hubiéramos visto más destellos de genia si se gestionaban mejor esos minutos?

Teniendo en cuenta todo lo ocurrido, España está en un posición histórica. La Roja nunca ha estado más allá de una semifinal en un torneo importante, y eso fue en la Eurocopa de 1997. Ahora, están a una victoria sobre Inglaterra de convertirse en campeonas del mundo.

“Estamos entre las cuatro mejores del mundo, pero estamos aquí para ser las mejores”, dijo Mariona después de la victoria en cuartos de final sobre Holanda. “Estamos felices porque estamos donde queríamos estar. Vinimos aquí para ganar la Copa del Mundo y estamos a dos partidos de hacerlo. Todo el mundo ha sufrido durante meses y han sido meses muy complicados. Si al final ganas el Mundial, podemos decir que ha valido la pena”.

Sea cual sea el resultado ante Inglaterra, la historia ya está hecha.