El brillo de Endrick con Brasil demuestra que el Real Madrid es más una realidad que un sueño

El reportaje publicado recientemente por "The Players Tribune" muestra el encanto que el Endrick ya tenía por el Madrid: “El equipo que siempre elijo en PlayStation”.

Un sueño que parecía tan lejano que hizo dudar incluso al niño. El objetivo, sin embargo, se cumplió en diciembre de 2022, cuando los merengues acordaron su compra al Palmeiras.

Ser fichado por el Real Madrid es una cosa y demostrar que estás para jugar en ese club es otra historia. Y será un desafío que Endrick tendrá que atravesar y superar, pero la vida muchas veces da señales.

Haber asumido el papel principal en un Palmeiras experimentado para ayudar al equipo a convertirse en campeón de Brasil en 2023 fue una de esas señales.

Pero la actuación con gol, entrega, pases atrevidos y visión de juego en el Santiago Bernabéu, en el 3-3 ante la selección española de 2024, parece salir del campo especulativo para ser etiquetado como evidencia: Endrick es jugador para el Real Madrid.

Y no sólo por lo que demostró con el balón, sino por su personalidad: no tuvo miedo de atacar y provocar al rival, pero tampoco se volvió loco tras una dura jugada con Dani Carvajal, veterano del Real Madrid, en la que acabaron con un respetuoso saludo, como si ya estuvieran entrenando juntos.

Horas después de su debut en el Santiago Bernabéu, Endrick utilizó su cuenta de Instagram para reflexionar sobre la inolvidable noche: “Un placer”, escribió. “Adiós”, añadió despidiéndose -en una secuencia de fotografías muy literales, en las que hace el gesto de extender la mano, como para encontrarse con alguien, antes de mostrar los cinco dedos en un movimiento de despedida.

La despedida allí fue, en realidad, un hasta pronto. La gran despedida comenzará en las semifinales del Campeonato Paulista, y el principal objetivo de esta vez es dejar un título estatal como regalo final.

Endrick piensa partido a partido, pero también piensa en el Real Madrid. Y Carlo Ancelotti ya piensa en contar con él para la próxima temporada, que arranca a mediados de este año. “En unos meses me iré a España”, afirmó Endrick en el texto publicado por "The Players Tribune". Unos meses es diferente a decir fin de año.

En otras palabras, el Campeonato Paulista es su última oportunidad de ganar otro trofeo para el Palmeiras. En cada partido, ya sea en el campeonato estatal, en el inicio del Brasileirão o en la fase de grupos de la Libertadores, su presencia estará tan presente como el aroma a despedida.

Esto se aplica a los aficionados del Palmeiras y (¿por qué no?) a los aficionados de los clubes rivales. Si Endrick no tiene que escribir los principales capítulos de su historia en Brasil, lo que queda es ver qué poca historia aún pueden escribir sus pies antes de cruzar el océano.

Ésta ha sido la realidad del fútbol de clubes brasileños durante décadas: los grandes trabajos aquí hechos son sólo introducciones, algunas espectaculares (como Endrick o Neymar), otras breves (los casos de Vini Jr. y Rodrygo y muchos otros). La obra completa, el clímax... sólo se da en otros idiomas.

El sueño de brillar en el fútbol europeo, en medio del glamour de la Liga de Campeones, en los mejores campos de Europa, junto a las mayores estrellas del deporte y ganar mucho dinero para hacer todo esto en países en los que es mucho más seguro vivir, es un enorme atractivo.

Pero a Brasil todavía le queda la selección para mirar a una gran estrella de cerca, de esas que todo el mundo envidia y admira, y se golpearán el pecho para decir “¡este es nuestro!”. Y con la camiseta de Brasil, Endrick ya demostró que está muy cómodo. Aún quedan muchos sueños por convertir en realidad.