Estuvo varias semanas de baja y pareció incluso desaparecer de la mente de Xavi Hernández con la llegada de los tres fantásticos en el mercado invernal: Adama Traoré, Pierre-Emerick Aubameyang y Ferran Torres. La delantera estaba copada y, encima, Ousmane Dembélé había vuelto por la puerta grande tras el veto de dos semanas por no extender su contrato con el Barcelona más allá del 30 de junio de este 2022. Memphis Depay reapareció tras su lesión en el bíceps femoral del muslo izquierdo que le tuvo de baja desde principios de diciembre. Pocos contaban con él, y menos todavía tras unos últimos partidos decepcionantes antes de caer lesionado en el Allianz Arena de Múnich, el día que el Barça cayó eliminado de la fase de grupos de la Champions League.
Desde ese día, Memphis no había pisado el césped mientras el conjunto liderado por Xavi Hernández crecía de manera exponencial. Llegaban los nuevos delanteros, el equipo se reconstruía en la fase de creación con la llegada de Dani Alves y la vuelta de Pedri, y el Barça empezaba a marcar goles. Incluso de cuatro en cuatro. Muchos se olvidaron entonces de Memphis Depay, ese delantero neerlandés que se había puesto en el bolsillo a la afición azulgrana en un inicio de temporada caótico en el que el "león" debía suplir de golpe la salida de Lionel Messi y la baja por lesión de Ansu Fati, que había heredado el '10' del argentino. Depay cumplió con creces sin que nadie esperase su rendimiento. Hasta que rebajó las expectativas volviendo a su versión más habitual. De hecho, Memphis no es nueve y seguía jugando en la punta del ataque sin ser un experto.
Este domingo, el dorsal '9' del Barcelona recordó a todos que sigue siendo útil. Y no solamente eso, sino que continua siendo el máximo goleador del conjunto blaugrana en LaLiga, a una distancia sideral del segundo. Memphis Depay lleva 10 goles, uno más que Luis Suárez y dos más que Rafa Mir o Gerard Moreno, que en su DNI sí llevan la etiqueta de goleadores. En el Barça, quién le persigue es su compatriota Luuk de Jong, que ha anotado cinco dianas, por las cuatro de Aubameyang, que debutó hace menos de un mes y que suma cinco partidos vestido de azulgrana. Pero Memphis sigue a su bola. Volvió el domingo de la semana pasada ante el Athletic Club y marcó en el primer balón peligroso que tocó dentro del área. Y ayer en Elche dio la victoria transformando con seguridad y potencia un penalti decisivo que él mismo provocó. Lo mandó a la escuadra sin despeinarse.
Ahora le tocará a Xavi decidir qué rol le espera a Memphis. Ferran Torres y Aubameyang parecen fijos arriba, mientras que la otra pieza bailaba hasta ahora entre Adama y Dembélé, con la opción de Gavi como cuarto centrocampista dejando la banda izquierda libre para las subidas de Jordi Alba. Pero Depay volvió con fuerza y con ganas de apoderarse de un puesto en la delantera en base a méritos contrastados. El entrenador tiene, ahora sí, opciones para escoger según la variante táctica que prefiera utilizar. ¿Será Memphis un comodín o un jugador imprescindible a partir de ahora?