La Selección mexicana logró vencer 4-1 a Francia, con una gran actuación de todo el equipo, que supo comportarse a la altura y dar un golpe de autoridad en la pelea por las medallas.
Les Bleus se vieron muy lejos de su mejor nivel, teniendo como uno de sus únicos elementos rescatables a André-Pierre Gignac, que logró descontar desde los once pasos. Al minuto 69, César Montes hizo una barrida imprudente que el juez central señaló como pena máxima.
Fiel a su estilo, el Bomboro se paró frente a los once pasos y puso el balón por debajo de los brazos de Guillermo Ochoa, haciendo en ese momento el 2-1 que de muy poco les sirvió.