Pese a que no se autorizaron lienzos ni cualquier instrumento musical en la Garra Blanca, el Clásico 177 entre Colo Colo y Universidad Católica contó con incidentes que detuvieron momentáneamente el fútbol.
Si bien fueron aislados, de una parte de los hinchas, cuando se instaló un lienzo que rezaba "los pacos los mataron" comenzaron a caer fuegos artificiales (permitidos) a la cancha principal David Arellano y el primero de estos proyectiles casi lo roza al golero Brayan Cortés. Fuerzas Especiales de Carabineros se instalaron debajo de la Tribuna Cordillera y tras seis minutos se repuso el partido.
