OPINIÓN
El Real Madrid es campeón del mundo. Otra vez más. Nunca nadie antes había logrado tres Champions League consecutivas. Y los blancos lo hicieron. Nunca nadie antes había logrado tres Mundialitos consecutivos. Y ahora, los blancos también lo consiguieron. Pasan los años, pasan las crisis, pasan los debates, pasan las generaciones, pero al final lo que nunca pasa es la condición de campeón que acompaña siempre al Real Madrid. Incluso en estas fechas donde faltaron resultados tras las salidas de Zidane y de Ronaldo, y donde se cambió de entrenador tras apenas catorce partidos, el club blanco no deja de ganar. No se le ve hacer el primavera como hizo River Plate ante Al Ain. Pese a quien pese, es el campeón de campeones. Sigue siéndolo.
Este sábado ante Al Ain, el Real Madrid venía avisado por la machada de las semifinales. Y no le perdió la cara al partido en ningún momento, a excepción únicamente de una jugada que tuvo que sacar de debajo del larguero el pitado Ramos al inicio. Pero a los tres minutos, Llorente ya había estrellado un balón en el palo, y al cuarto de hora Modric había puesto a los blancos por delante (1-0). Antes del descanso tuvieron cuatro ocasiones claras, pero no fue hasta la reanudación cuando Marcos Llorente mató el partido con una gran volea al saque de un córner. Una justa recompensa al derroche físico que viene desarrollando el mediocentro partido tras partido. 2-0 y los utileros estaban ya facturando la copa del Mundial de Clubes para que viajase a Madrid antes incluso de que Sergio Ramos marcase su gol con un soberbio testarazo al saque de un córner (los goles de Shiotani y Vinicius dejarían el marcador final en 4-1).
Con la conquista de este Mundial de Clubes, el Real Madrid corona así un lustro dorado con catorce títulos en cinco temporadas: una Supercopa de España, una Copa del Rey, una Liga, tres Supercopas de Europa, cuatro Mundial de Clubes y, sobre todo, cuatro Champions League. O lo que es lo mismo, a una media de tres títulos por temporada desde 2014. Ganando una de cada dos competiciones que disputó. Demoledor.
Los habrá que jueguen mejor, que tengan jugadores más populares, que tengan entrenadores más queridos, con una filosofía más depurada o aceptada, con más apoyo mediático, con más o menos presupuesto… Pero nadie gana más que el Real Madrid, sea cual sea la situación. Y eso, como decía Solari este viernes, hay que ponerlo en valor. Más de lo que se viene haciendo.
