De Belluschi a Facundo Colidio: las novelas de mercado entre Boca y River

Boca y River compiten en todo. En lo deportivo, cada vez que se enfrentan en el Superclásico. En la cantidad de títulos. El el número de hinchas. Hasta en los seguidores que tiene cada uno en las redes sociales. Y, por supuesto, también en el mercado de pases.

A lo largo de la historia, los dos gigantes del fútbol argentino siempre buscaron reforzarse con los mejores futbolistas de los demás clubes del país. Y muchas veces quisieron al mismo tiempo, al mismo jugador: a veces ganó el Millonario; otras, el Xeneize; y en algunas ocasiones, ninguno de los dos.

A continuación GOAL repasa las novelas de mercado más recordadas de los últimos años entre River y Boca

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El caso del delantero que el 30 de junio finalizó su préstamo con Tigre desde Inter de Milán es uno muy particular. Formado en las Inferiores de Boca, no llegó a debutar en Primera antes de ser transferido al conjunto italiano en 2017 por la cifra récord de 9 millones de dólares, cuando apenas tenía 17 años.

A pesar de la multimillonaria inversión, el rafaelino tampoco sumó minutos oficiales en el Neroazzurro (sólo disputó algunos amistosos de pretemporada) y fue cedido al fútbol de Bélgica antes de recalar en el Matador a principios de 2022.

El muy buen nivel que mostró en Victoria hizo que River lo pusiera en su radar, a la espera de que terminara su cesión, pero cuando llegó el momento de negociar el que avanzó primero fue el club donde el delantero se formó: el Xeneize realizó una oferta para adquirir el 85% del pase en cinco millones de dólares. No obstante, Colidio decidió declinar la propuesta.

La gestión más firme parecía estar realizándose desde México, ya que Toluca había ofertado cinco millones de euros por el pase, pero el jugador nunca dio el visto bueno.

Y todo indica que el futuro del atacante finalmente será en Núñez y la negociación fue confirmada por Javier Zanetti, vicepresidente del club italiano: "Boca se interesó y con nosotros casi había un acuerdo, pero después decide el jugador, decidió esperar y salió esto de River", sostuvo el Pupi en ESPN, para luego confirmar que las charlas van encaminadas y hasta deslizar que lo que falta es "la firma, estamos muy cerca. Ya hablamos con Patanián, con Enzo (Francescoli) y con el presidente, falta poco".

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El gran momento del Sabalero en los últimos años generó que varios jugadores de esta lista se encuentren en el club santafesino. Pero el caso del mediocampista tiene un plus especial: al "Superclásico" entre Boca y River se le sumaron los dos de Avellaneda. De hecho, fue Independiente el primero en sondearlo, atento a que su contrato vencía el 30 de junio de 2022. Pedido por Eduardo Domínguez, con quien fue figura en la Copa de la Liga 2021, el Rojo picaba en punta, aunque la indefinición provocó que Racing también intentara entablar una negociación.

Sin embargo, apareció Boca y todos esperaban que se sume al equipo de Battaglia, especialmente porque su representante es nada menos que el mismo que el de Riquelme. Uno más uno daba dos, pero la historia se dilató, el acuerdo nunca terminó de estar cerca y el propio Xeneize se bajó. Lo que nadie esperaba era que, de golpe, River fuera el principal candidato, incluso en plena guerra con Colón por la suspensión del préstamo de Beltrán.

Finalmente, el mediocampista eligió con el corazón y a mediados de 2022 se sumó al Millonario, equipo del que es hincha.

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Nuevamente un jugador de Colón protagonizó una novela de mercado entre Boca y River. La aparición de la joven joya del Sabalero fue importante en la Copa de la Liga 2021 que ganó el conjunto santafesino, pero fue en el segundo semestre del año cuando dio un salto cualitativo interesante, notándose su maduración y despertando el interés de los dos clubes más grandes del país.

Por si quedaban dudas de que no eran sólo rumores, su representante, Martín Sendoa, dejó en claro que es concreto el interés: "Estamos 50 y 50: Boca llama, pero River está haciendo lo suyo", indicó en charla con TyC Sports y aunque señaló que "River está hablando con Colón", remarcó que "Boca va a la carga". La última declaración del empresario es que "Vignatti me dio a entender que cierra con River". De hecho, trascendió que la operación podría realizarse a cambio de 7 millones de dólares por el 70% del pase, ya que la cláusula ronda los 10 millones. Finalmente, ninguna de las propuestas prosperó y el pibe fue vendido en junio a un grupo empresario que intentará ubicarlo en Europa a fin de año.

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A principios de 2021, Marcelo Gallardo necesitaba un sucesor para Gonzalo Montiel en el lateral derecho y Miguel Ángel Russo también tenía el puesto vacante en la Ribera tras la decisión de Julio Buffarini de no renovar su contrato. Y a la hora de buscar, ambos miraron hacia Santa Fe: mientras el Millonario llevaba varias semanas negociando con el Sabalero y estaba cerca de llegar a un acuerdo para comprar el 50 por ciento de la ficha, el Xeneize se metió en el medio y quiso soplarle el jugador. Finalmente, el defensor desembarcó en Núñez, aunque nunca terminó de asentarse y un año más tarde fue cedido a Independiente.

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El del mediocampista es tal vez el caso más paradigmático de la batalla entre ambos gigantes por un futbolista, a punto tal que llegó hasta la Justicia. En 2005, Boca acordó con Newell's la compra del 50% de los derechos económicos tanto de Belluschi como de Ezequiel Garay, pero ambos jugadores permanecerían en la Lepra hasta mediados de 2006. Sin embargo, el defensor finalmente fue vendido a Racing de Santander y cuando llegó el momento de que se concretara la transferencia del volante al Xeneize, apareció River con 5 millones de dólares y se lo quedó. El club de la Ribera, entonces, reclamó ante la Justicia el pago del dinero que le correspondía por la operación y el litigio siguió abierto hasta 2010, cuando el conjunto rosarino canceló la deuda.

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Antes del comienzo de la temporada 2012/13, River tenía todo prácticamente cerrado para quedarse con el cordobés, pero Daniel Angelici llamó al jugador para decirle que no firmara porque lo quería para Boca. "Los dos tienen un 50% de chances", llegó a decir el central, aunque finalmente el Xeneize impuso mejores condiciones de pago para Rosario Central y se quedó con el pase.

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La gran novela del verano 2017 terminó con Boca y River como perdedores. El Millonario tenía al mediocampista como prioridad número uno, pero Rosario Central le puso todo tipo de trabas como represalia por la operación de Marcelo Larrondo. Entonces apareció el Xeneize, con una oferta inferior pero con mejores condiciones de pago, que el Canalla parecía dispuesto a aceptar. Sin embargo, finalmente llegó Sevilla con sus euros y el chaqueño se fue para España, donde no tuvo mucho lugar.

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A mediados de 2016, el mediocampista, por entonces en Godoy Cruz, llegó a asegurar que "sería un orgullo muy grande jugar en River", pero finalmente terminó en Boca. Duró poco: en agosto del 2017, tan sólo un año después de llegar a la Ribera, pasó a Estudiantes de La Plata.

A mediados de 2015, el Millonario y el Xeneize pelearon mano a mano por la contratación del lateral de Newell's, que finalmente decidió aceptar los 3 millones de dólares que pagó River por el 80 por ciento del pase. Casco fue de menos a más y se transformó en una pieza clave para el equipo de Gallardo, con destacadas actuaciones contra Boca, precisamente.

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A mediados de 2010, el Xeneize preguntó por el uruguayo, pero no tenía cupo de extranjeros disponible para incorporarlo. Un año después, el interés se reavivó, pero River le hizo una oferta concreta a Godoy Cruz y se quedó con el mediocampista como uno de los refuerzos clave para buscar el ascenso. Tiempo después, el charrúa le marcaría goles decisivos al Xeneize, incluido uno en la Copa Libertadores de 2015.

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Durante el receso por el Mundial de 2014, Boca inició gestiones para quedarse con el Pachi y, cuando parecía que tenía todo cerrado, apareció River con una oferta que hizo temblar la negociación. Sin embargo, finalmente el Xeneize aceptó pagar 2,6 millones de dólares por el 60% del pase y se quedó con el hombre de Rosario Central.

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El delantero la rompía en la B Nacional con Banfield y, a fines de 2013, River pidió condiciones para contratarlo, pero no hubo acuerdo. Seis meses después, el Millonario volvió a interesarse, pero Boca puso 2,5 millones de dólares y se quedó con el atacante, hincha del club de toda la vida. En su primer Superclásico se retiró del Monumental con gestos hacia los hinchas locales.

El capitán y máximo referente del actual plantel de River estuvo a un paso de ser jugador de Boca en 2003. Mauricio Macri, por entonces presidente Xeneize, anunció en octubre de 2002 que "en enero o junio, Ponzio se pondrá la azul y oro" y el propio volante deseó: "Ojalá que se dé, que Boca se fije en mí me ilusiona". Sin embargo, finalmente fue vendido a Zaragoza y, cuatro años más tarde, volvió al país para ponerse la banda roja.

A mediados de 2016, River inició gestiones para quedarse con el juvenil delantero, que estaba en conflicto con Talleres luego de romperla en la B Nacional. Cuando parecía que todo estaba encaminado para cerrarse, se divulgaron tuits del jugador en el que se burlaba del Millonario y expresaba su fanatismo por Boca, por lo que en Núñez frenaron las gestiones. Finalmente, el atacante terminó en el Xeneize.

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Un caso particular. Si bien desde Núñez nunca hubo gestiones para contratarlo, a mediados de 2009 el mediocampista se reconoció fanático del Millonario (su hermano fundó una peña del club en Santa Fe) y admitió: "Mi sueño es jugar en River". Seis meses después de esa frase, llegó a Boca a préstamo desde Porto: jugó dos partidos.

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Durante el verano de 2013, el Burrito era la joya más preciada del mercado de pases local. Los cinco grandes le preguntaron condiciones a Corinthians por su pase, pero sólo Boca, River y San Lorenzo decidieron avanzar con las gestiones. El Millonario fue el primero en bajarse y el Xeneize finalmente le ganó el mano a mano al Ciclón.

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Un caso emblemático. A mediados de 1996, el chileno llegó al país para firmar con Boca y hasta se sacó una foto en la puerta de La Bombonera. Sin embargo, Carlos Bilardo rechazó su contratación a último momento para sumar a Hugo Romero Guerra (aunque el Doctor hoy lo niega) y el Matador firmó a los pocos días con River.

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"Me pone feliz que un club como Boca se fije en mí", reconoció Lucas Alario a fines de 2014, cuando su nombre sonaba para reforzar al Xeneize. Sin embargo, las gestiones finalmente no pasaron de un sondeo: "Trajimos a Osvaldo y ya teníamos a Calleri. Si traemos una apuesta piden jerarquía y cuando se paga la jerarquía dicen que no hay ingenio para incorporar", explicó tiempo después Juan Simón, por entonces manager del Xeneize. Finalmente, seis meses después de aquella desistida operación, el santafesino llegó a River para marcar los goles clave que le darían al Millonario la Copa Libertadores.

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Uno de los últimos nombres en añadirse a la lista de disputas. El cordobés jugaba muy poco en Sao Paulo y tanto el Xeneize como el Millonario estaban en la búsqueda de un lateral derecho. “¿A qué jugador no le tienta de poder jugar en un equipo grande de Argentina? Más sabiendo lo que es la liga argentina.. Para mí es un orgullo que ese esté hablando tanto de Boca como de River. Sabemos la magnitud que tiene cada equipo, pero hay que esperar", declara Buffa, que finalmente en diciembre del 2017 firmaría con Boca, desatando una catarata de críticas por parte de muchos hinchas de San Lorenzo que lo trataron de "traidor".

Independiente

Según contó el propio Chino , River estuvo cerca de contratarlo tanto en 2015 como en 2018, aunque la disputa con Boca se dio a mediados de 2020. El delantero estaba en conflicto con Independiente por una importante deuda salarial y había tomado la decisión de irse del club, por lo que Marcelo Gallardo le pidió a la dirigencia del Millonario que iniciara gestiones para contratarlo como reemplazante de Ignacio Scocco. Al mismo tiempo, el Xeneize avanzó con una oferta formal para el cordobés e incluso se llegó a especular con la posibilidad de un trueque de futbolistas. Sin embargo, finalmente los dirigentes del Rojo se comprometieron a pagarle lo que le debían y el atacante decidió quedarse en Avellaneda.