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Messi contra el efecto Anoeta


EDITORIAL

Algo tiene Anoeta para ser el estadio donde más veces tropezó el Barcelona durante el trienio con Luis Enrique Martínez. Allí sucedió uno de los capítulos más oscuros de la relación entre el asturiano y Leo Messi, cuando dejó al rosarino en el banquillo tras las vacaciones navideñas y el equipo naufragó con estrépito, provocando el mayor enfado del delantero desde que está en Barcelona. Pero no es excepcional morder el polvo a domicilio de la Real Sociedad. Sin ir más lejos el Barcelona solo ha ganado en una de sus últimas ocho visitas ligueras, la que logró la temporada pasada con un Messi estratosférico que marcó un gol y dio otro a Luis Suárez.

Messi, de rey del gol a amo de la asistencia

El rosarino es el denominador común en el -poco- éxito que ha alcanzado el Barcelona en San Sebastián, a la que le ha metido la friolera de 13 goles, 11 de los cuales han sido en la Liga. En esta ocasión, además, Messi no ha viajado con la selección argentina. El rosarino se ha quedado en Barcelona después de haberse dado un tiempo antes de decidir si vuelve a enfundarse la casaca de la 'albiceleste' y ha podido trabajar -y descansar- con total normalidad, algo que su entrenador, Ernesto Valverde, celebró en la rueda de prensa previa al partido.

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"El hecho de que haya jugadores que no hayan tenido este desgaste es algo que tenemos en cuenta, no lo vamos a negar, hay margen para entrenar y descansar, evitando viajes y desgastes en poco tiempo, hay jugadores que sí lo han tenido que hacer y en este sentido estamos mejor" comentó en líneas generales a pesar de que la pregunta se centraba en el estado del rosarino, que incluso se mostró acompañando a sus dos hijos mayores en el inicio del nuevo año escolar.

"Encontré a Messi llorando como un nene que perdió a la madre"

Porque hay que tener muy en cuenta que "cuando van con la selección hay dificultades añadidas al retomar el trabajo" según destacó Valverde, un problema que no tendrá su estrella en uno de los estadios que más difícil se lo ha puesto al Barcelona durante las últimas temporadas. Porque, además, con el 'txingurri' tan turbia dinámica dio muestras de ser cosa del pasado tras el 2 a 4 de la temporada pasada. Esta vez Messi llega descansado y habiendo trabajado el partido durante las últimas dos semanas. Quizá a partir de mañana Anoeta deje de intimidar tanto al Barcelona.

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