Boca esperaba con los brazos abiertos el regreso de un viejo conocido de la casa como Éver Banega, que había tomado la decisión de dejar el fútbol de Arabia Saudita y regresar al Xeneize, club en el que debutó en Primera. De hecho, ya estaba todo acordado y solo restaba la desvinculación de Al-Shabab para que pueda firmar el contrato.
Sin embargo, el miércoles 3 de enero la historia dio un giro rotundo y en Rosario se habla de que el volante terminará en Newell's, del cual es hincha y donde jugó seis meses en el 2014. Incluso, un día después habló Ignacio Astore, presidente de la Lepra y dijo que "hay grandes posibilidades de que Banega juegue en Newell’s".
LA HISTORIA DE UN REGRESO ¿FALLIDO?
La novela comenzó a fines de noviembre, como un rumor que rápidamente tomó estado público y fue comprobado como cierto. El volante que debutó en febrero del 2007 y ganó la Copa Libertadores de ese año, para luego edificar una carrera en la que pasó por Valencia, Atlético de Madrid, Newell's, Sevilla, Inter Milán y, actualmente, Al-Shabab, tenía decidido volver a vestir la azul y oro.
Después de cuatro temporadas en Arabia Saudita, a los 35 años consideró que es momento de regresar al Xeneize y, según TyC Sports, había empezado las conversaciones para adelantar seis meses el final de su contrato, que termina en junio del 2024. Y mientras negociaba con su actual club, el rosarino también estaba en contacto directo con Román, con todo cerrado: si Riquelme ganaba las elecciones como ocurrió, Banega sería el primer refuerzo de Boca de cara al año próximo.
Y para mostrar sus intenciones, el domingo 3 de diciembre publicó una historia en su cuenta de Instagram, con una imagen suya con la camiseta de Boca ante Toluca y dos corazones, lógicamente, uno azul y otro amarillo.
Próximo partido
En el medio, Newell's había hecho un tímido intento para saber si prefería jugar en la Lepra, pero la primera respuesta era negativa y todo se encaminaba a que vuelva a vestir la azul y oro. El 24 de diciembre, en un posteo de Instagram, aseguraba que era su última Navidad en Medio Oriente antes de regresar a Argentina.
Así las cosas, la complicación más grande para que Banega llegara a Boca en este mercado de pases era la situación con Al Shabab, dueño del pase de Éver, que esperaba cobrar un dinero por los seis meses de contrato que todavía tiene en el club. La cifra rondaba los cuatro millones de dólares, un número imposible para la economía xeneize. Al mismo tiempo, el volante jugó con la 10 en la victoria de su club ante Al-Wahda y recibió la ovación de los hinchas, que le brindaron una cálida despedida más allá que reste oficializar la desvinculación.
Tras el encuentro, se subió al avión y Juan Román Riquelme esperaba el visto bueno. Sin embargo, la dirigencia Leprosa pisó el acelerador y volvió a abrirle las puertas, con una propuesta concreta que está en manos del mediocampista, mientras en Boca aseguran que no piensan cambiar ni una coma de lo ya ofrecido, por lo que todo está en manos de Banega.
LA CONFIRMACIÓN DE IGNACIO ASTORE
El mandatario de Newell's habló en TyC Sports y aseguró que el regreso del volante está encaminado: "Todavía no está terminada la película, faltan pequeños detalles. Están confeccionando el contrato y una vez que se den todos los parámetros, se concretará la operación", para luego agregar que "hablé con él y me dio su palabra de que venía. Tenemos que enviar algunos papeles a Arabia, antes del fin de semana está todo terminado".
La oferta para que se vista de rojinegro incluye un contrato por dos años con opción a un tercero, por lo que prácticamente terminaría su carrera en Rosario.