El Atlético de Madrid ha vivido esta última década como una de las más gloriosas de su historia, si no ha sido la que más. De la mano de Diego Pablo Simeone el equipo rojiblanco se ha consagrado entre los grandes de Europa ganando dos Ligas y llegando a las últimas rondas de la Champions, incluyendo dos finales.
Para ello, la dirección deportiva del club ha acometido un gran número de fichajes, siendo la mayoría de ellos muy productivos y absolutamente clave para que el cuadro del Manzanares triunfase. Pero no sólo ha habido luces en el apartado de fichajes, también ha habido sombras. Aquí pasamos a analizar a diez futbolistas que ficharon por el Atlético pero que nunca llegaron a debutar.
Rúben Micael
El centrocampista portugués llegó en el verano de 2011 procedente del Oporto, al igual que Radamel Falcao. Sólo un mes después se marchó cedido al Real Zaragoza, evidenciando lo que era un secreto a voces: su fichaje sólo era parte del traspaso del delantero colombiano, que era al que realmente quería el Atlético. Se marcharía otro año más cedido, en este caso al Braga, el cual lo compraría por tres millones de euros en el verano de 2013.
Martín Demichelis
El veterano central argentino llegó en el verano de 2013 para reforzar la zaga de Simeone. El jugador llegaba libre procedente del Málaga donde había rendido a gran nivel. Sin embargo, una oferta en las últimas horas del mercado de parte del Manchester City hizo que Demichelis se marchase rumbo al Etihad dejando cinco millones de euros en las arcas rojiblancas.
André Moreira
El portero de las cesiones. El portugués llegó en el verano de 2014 como apuesta de futuro (19 años) con la intención de competirle el puesto a Jan Oblak y Miguel Ángel Moyá. Sin embargo nunca llegó a formar parte de la plantilla rojiblanca pues todos los años se fue cedido, incluyendo una temporada en la que empalmó dos cesiones tras durar solo unos meses en el Braga.
Emiliano Velázquez
El central uruguayo jugó seis temporadas en la Comunidad de Madrid, pero ninguna de ellas en el Atlético. Llegó en el verano de 2014 procedente de Danubio y enseguida se marchó cedido al Getafe dos temporadas y luego al Rayo Vallecano, con el Braga de por medio durante una temporada. Tras un año en el Rayo se marchó libre a Vallecas donde estuvo tres temporadas más.
Santos Borré
¿Se acuerdan del jugador clave en la consecución de la Europa League con el Eintracht de Frankfurt la pasada temporada? Sí, pues Rafael Santos Borré llegó a fichar por el Atlético de Madrid en el verano de 2015. Pero tampoco llegó a debutar y tras dos cesiones en el Deportivo Cali (equipo del que le ficharon) y el Villarreal fichó en 2017 por River Plate antes de regresar a Europa el pasado verano de la mano del Eintracht.
Diogo Jota
Quizás el caso mas sangrante de todos estos fichajes. Diogo Jota fichó por el Atlético de Madrid en 2016 y tras dos años cedido en el Oporto y en el Wolves, el equipo inglés lo fiché en 2018 para que luego recalase en el Liverpool en 2020 donde ahora se ha convertido en uno de los mejores atacantes de la Premier League. Está claro que su fichaje era un acierto.
Nehuén Pérez
El central argentino fichó por el Atlético en el verano de 2018 pero nunca llegó a jugar un solo minuto. Cuatro años de cesiones, siendo la última en el Udinese donde coincidió con Nahuel Molina, jugador que ha fichado este verano por los rojiblancos. Ahora, tras acabar contrato, Nehuén Pérez se ha marchado libre al Udinese en una especie de cambio de cromos entre Nahuel y Nehuén, aunque fuesen operaciones distintas.
Jonny Otto
Uno de los casos mas extraños de todos los que repasamos aquí. El lateral español llegaba del Celta y prometía mucho, sin embargo, la necesidad de aligerar la masa salarial para inscribir a Álvaro Morata obligó a cederlo al Wolverhampton, el cual en enero ejecutó la opción de compra que había sobre él de 21 millones de euros.
Nico Ibañez
El delantero argentino ha sido de los mas silenciosos de la lista. Llegó desde México en el verano de 2019 y realmente nunca se fue. Se quedo cedido en el San Luis dos temporadas y tras ello lo fichó el Pachuca, tambien de México. Costó 900.000 euros y lo vendieron por 3 millones. Buen negocio.
Benjamin Lecomte
El guardameta francés llego cedido del Mónaco pero no convenció a Simeone ni para jugar la Copa del Rey. Tras volver este verano al cuadro del principado, se ha marchado cedido de nuevo, esta vez al Espanyol, donde veremos si tiene mas oportunidades.


