Universidad de Chile empató sin goles en La Serena contra el Granate y resintió sus posibilidades de acercarse a los primeros lugarees para estancarse en zona de Copa Sudamericana y ver cómo se le acercan el resto de los aspirantes a entrar a los torneos internacionales. Pero el ciclo de Rafael Dudamel extendió su invicto a tres presentaciones que le suman confianza al plantel azul.
En un partido muy apretado, donde Zacarías López logró mantener el cero en su meta para acercar al local hacia su objetivo de salvar la categoría, el León se acercó temprano vía Joaquín Larrivey, alentado principalmente por Walter Montillo, el eje del mediocampo y dueño de la jineta ante la ausencia de Matías Rodríguez, pero no encontró el premio que tanto buscó durante aquel primer tiempo en el que primaron los duelos hombre con hombre y la refriega medular.
Entre las buenas noticias que acumuló la escuadra laica está la primera vez de Cristian Barros, el extremo que aportó proyección y quien mejor se mostró para recibir los pases al espacio, más una nueva titularidad para Reinaldo Lenis y Pablo Aránguiz, que estuvieron atentos a cada falla en las bandas papayeras, que contrarrestaron a tiempo cada adversidad.
Miguel Ponce llegó a 7 duelos sin derrotas, se encaminó rumbo a la salvación y aunque durante el trámite perdiera a Enzo Ferrario -a quien se le trabó la rodilla- y al luchador Humberto Suazo -por un tirón-, pudo acomodarse con sus armas y desde lo táctico ambas defensas igualaron la furia de los ataques rivales. El cero resultó siendo justo pese a no conformar a dos proyectos que cada día lucen más firmes en busca de un final de temporada cómodo.
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