Morata Dani Olmo Georgia España Morata Fase Clasificación a Qatar 2022Getty Images

La selección no le importa a nadie

Ruben Uria BlogGoal

La selección no le importa a nadie, pero cuando juega las audiencias de televisión dicen lo contrario. La selección no le importa a nadie, pero cuando vence un torneo importante el personal toma las calles y en la fiesta de Blas todos tomamos una copa de más. La selección no le importa a nadie, porque este país es más de clubes que del equipo de todos, pero cuando pierde un partido, las hostias caen a manta como si no hubiera un mañana. La selección no le importa a nadie, pero el periodismo busca hasta debajo de las piedras doscientos debates para amenizar unos días que por lo visto no le interesan a nadie pero el periodismo quiere que nos interesen a todos. La selección no le importa a nadie, pero como en este país hay cincuenta millones de potenciales seleccionadores, resulta que cada lista es una infamia, cada presencia un disparate y cada ausencia, una ofensa a un club, cuya afición se ofende, tenga motivo o no.

La selección no le importa a nadiel pero los "haters" pasan la travesía del desierto escudriñando qué minutos tienen los jugadores de su equipo y cuánto descansan, mientras esperan que se produzca cualquier tipo de infortunio en forma de lesión para destrozar a una selección que estorba más de lo que aporta. La selección no le importa a nadie si es el cortijo privado de algunos jugadores y le interesa a todo el mundo siempre y cuando la supremacía de sus futbolistas sea la tendencia dominante. La selección no le importa a nadie cuando juega partidos amistosos, salvo que los pierda porque entonces lo que importa es la pésima imagen. La selección no le importa a nadie cuando se juegan partidos de clasificación, salvo que el rival sea una "maría" que te ponga las peras al cuarto porque entonces el seleccionador es más inútil que la última rebanada del pan "Bimbo". La selección no le importa a nadie en los grandes torneos porque siempre hemos sido campeones de mundo en ganar amistosos, pero cuando gana algún torneo, nos ponemos "La Roja", tomamos las calles y gritamos al viento la pamema del "soy español, a qué quieres que te gane".

La selección no le importa a nadie si juegan "los mismos de siempre", tampoco le importa a nadie si juegan "unos que no conoce ni su padre a la hora de comer" y tampoco le importa a nadie si los que juegan son chavales jóvenes que son unos fenómenos si ganan y unos tarados si pierden. La selección no le importa a nadie salvo cuando el seleccionador dice lo que queremos escuchar, juega como nosotros queremos que juegue, pone a los que nosotros creemos que debe de poner y cambia a los que nosotros entendemos que debe cambiar. La selección no le importa a nadie porque, en realidad, es una partida de dados en bucle. Si lanza el dado y saca de uno a cinco, no le importa a nadie. Y si saca seis, vuelve a tirar. La selección no le importa a nadie, pero nos pasamos el día hablando de que no le importa a nadie, porque hace tiempo que no queremos que nos importe nada. La selección es una contradicción. Parece que no, pero sí. 

Rubén Uría

Anuncios