Pablo Aránguiz vive sus peores días en Universidad de Chile. Y es que este martes el Centro Deportivo Azul, complejo del cuadro estudiantil, amaneció con rayados y pancartas que exigen la salida del volante del club.
“No más zorras en la U” y “Aránguiz fuera” fueron los escritos de los fanáticos en uno de los portones de acceso al recinto, en el que además colgaron una marioneta con el rostro del futbolista en la que se puede leer "Pollo Pollo".
Cabe recordar que el formado en Unión Española fue agredido por los hinchas luego de la caída 2-1 en manos de Curicó Unido el pasado sábado 30 de octubre en El Teniente. De hecho, la institución emitió un comunicado rechazando lo sucedido en Rancagua.
“El club repudia y condena enérgicamente estos hechos, los cuales constituyen, derechamente, actos de violencia, los que resultan inaceptables e intolerables”. “(Azul Azul) ejercerá todas las acciones que resulten del caso en contra de los partícipes de estos hechos”, señaló el texto. Vale consignar que el jugador recibió amenazas de muerte que lo tienen en la actualidad con protección policial.
"Como institución, no vamos a permitir ni tolerar actos de violencia, amenazas o acciones que pongan en riesgo la vida e integridad de los jugadores o de su entorno familiar. Ningún pretexto o contexto pueden justificar el que jugadores profesionales sean objetos de las acciones precedentemente señaladas", expresó el cuadro colegial desde sus canales oficiales.
"Por lo anterior, y velando por la seguridad e integridad de jugadores de nuestro plantel, hemos instruido para que, en el corto plazo, se ejerzan las acciones judiciales tendientes a identificar a los responsables de las conductas contrarias a la ley que se han producido en los últimos días. Como Club seremos enfáticos en la defensa y respeto a cada uno de quienes forman parte de nuestra institución, y no permitiremos que acciones como las descritas queden sin investigación y posterior sanción penal", sentenciaron.
En lo futbolístico, la escuadra laica tendrá la misión de escapar de la zona de promoción este jueves cuando visite a Ñublense, en el Estadio Nelson Oyarzún, a las 20:30. El equipo que ahora dirige Cristián Romero, tras la renuncia de Esteban Valencia, viene de ocho partidos sin ganar, con cinco derrotas consecutivas.