le han impedido a Eden Hazard (30 años) disfrutar del fútbol desde 2019. Las dos primeras temporadas del '7' en el Real Madrid han sido un quiero y no puedo por culpa de los problemas físicos, que han ido borrando su potencial y le han privado de estrenarse en un Clásico. Para el próximo domingo (16:15 horas, Movistar LaLiga), 870 días después de su fichaje, busca romper esa especie de maldición.
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Las dos primeras oportunidades de medirse con el Barcelona se fueron al limbo por el mismo motivo, el percance en la zona del tobillo derecho que le llevó a ser operado por segunda vez en su carrera. La inoportuna patada de Meunier en noviembre de 2019 le alejó del Camp Nou y un nuevo contratiempo ahí en febrero frente al Levante, en plena rehabilitación, lo hizo del Santiago Bernabéu mientras le conducía a un quirófano en Dallas.
El curso pasado, más de lo mismo, con sendas lesiones musculares en octubre y abril. Era, y aún es, el cuento de nunca acabar, para desgracia del futbolista, de una directiva que apostó muy fuerte económicamente por él y de una afición que se ilusionó mucho con su refuerzo. Pero, curiosamente, pese a su baja el Real Madrid empató (0-0) el primero de esos encuentros y luego enlazó tres triunfos (2-0, 1-3 y 2-1).
A dos días del Clásico, el plan es que Hazard comience en el banquillo. Regresó de la Nations League con una sobrecarga en el isquio de la pierna derecha y se le ha controlado con sumo cuidado debido a sus antecedentes, motivo por el cual ni viajó a Kiev para la visita al Shakhtar (0-5). Ayer completó la sesión junto al grupo con buenas sensaciones pero sin fiarse porque ese feeling ya le ha traicionado antes. El belga ha preferido dejar la decisión en manos de Ancelotti y los médicos, que darán el visto bueno para que se suba al avión. Su participación o no lo marcarán su nivel de confianza y el curso del partido.
Dos Hazard-Barcelona con el Chelsea
Hazard, no obstante, sí sabe el sabor de jugar contra el Barcelona. Lo probó con el Chelsea en los octavos de la Champions 2017-18, sin grandes recuerdos. La ida en Londres terminó 1-1, con Eden (90 minutos) asistiendo en el 1-0, en el 62', pero luego igualó Messi , lo que complicó la vuelta. En ella, un doblete del propio Messi y un tanto de Dembélé mandaron a casa al Chelsea de Conte... y de un Hazard que, tras aquellos 82 minutos, no ha vuelto a tener al Barcelona delante.