Radamel Falcao García ha sufrido una racha de lesiones desde que llegó a Turquía, que le han impedido entregar lo mejor de su fútbol y goles que ilusionaban a la hinchada del Galatasaray, cuando se anuncio su llegada en el año 2019.
Lo anterior le había convertido en el foco de todas las críticas por parte de la prensa turca, que no entendía como podía ser sostenible un jugador que cobraba 5 millones de dólares por temporada y que no actuaba ni la mitad de los partidos del equipo.
La estancia del colombiano en el club se había convertido en una especie de olla a presión, que se activaba cada vez que se informaba de una nueva lesión del delantero cafetero, algo que sin duda calaba en la directiva del Cim Bom.
En vista de lo anterior, el presidente del equipo, Burak Elmas, dijo de manera oficial unas semanas atrás: "Hablé con Falcao y Feghouli. Tenían contrato, pero les dije que no era posible que pagáramos esos honorarios, que tenían que encontrarles un club".
Ahora ha sido el turno del entrenador Faith Termin, quien con mucha resignación ha aceptado la realidad del club: "En cuanto a la decisión sobre Falcao y Feghouli, el presidente hizo una declaración de que no se pueden pagar salarios altos debido a la política de costos. Él afirmó que había que tomar algunas decisiones en ese sentido. Tanto Falcao como Feghouli son jugadores valiosos para nosotros y que han servido al Galatasaray. Debemos aceptar la separación y la unión como algo natural, porque nosotros, como club, nos despedimos de todos nuestros jugadores que se fueron en los últimos años".
"Espero que se encuentre una solución, tanto para nuestro club como para los jugadores como Falcao lo antes posible, que este problema llegue a su fin", agregó el entrenador.
De concretarse su salida, el samario recibiría 2 millones de dólares como indemnización por el año de contrato que aún tiene vigente con el club, según informaron varios medios locales.
Por el momento no se conoce la reacción de Falcao, sin embargo, todo parece indicar que la MLS se presenta como el mejor destino, pues es conocida la oferta por parte del Inter de Miami, propiedad de David Beckham.