San Lorenzo completó una semana negra en un semestre con escasas luces. Luego de caer ante Racing por 2-0 y quedar afuera de la Copa de la Liga Profesional, Diego Dabove dio el paso al costado y dejó de ser el entrenador del equipo, a tan solo tres meses de haber asumido el cargo.
De nada le sirvió tener estadísticas favorables: en su ciclo dirigió 22 partidos y obtuvo 30 puntos, producto de ocho triunfos, seis empates y ocho derrotas. El equipo de Boedo desperdició la chance de meterse en la Fase Final del certamen, para la cual necesitaba un punto o, incluso, perder por solo un gol de diferencia.
Como si fuera poco, no pudo meterse en la fase de grupos de la Copa Libertadores al perder la serie ante Santos por el 1-3 de la ida en el Nuevo Gasómetro, por lo que no alcanzó la buena tarea en la revancha, donde tuvo contra las cuerdas al subcampeón de América. Y en el consuelo de la Copa Sudamericana bajó rápidamente los brazos, consiguiendo apenas un punto de los nueve que alcanzó a disputar.
Con tres partidos más por jugar pero virtualmente eliminado, la dirigencia que encabeza el cada vez más resistido Marcelo Tinelli deberá buscar al reemplazante del entrenador que comenzó con el pie izquierdo por las diferencias en torno a los hermanos Romero, que nunca convenció desde el juego y rápidamente fue rechazado por los hinchas.