El calendario está saturado. Esta afirmación es una evidencia que el Barcelona pudo pagar muy cara después de no haber tenid a disposición a la plana mayor de la plantilla durante los tres partidos amistosos disputados en Estados Unidos y que constituyeron la pretemporada azulgrana. Ernesto Valverde apenas pudo contar con la mitad de sus jugadores y ninguna estrella. "Será un hándicap en la Supercopa" advirtió tras finalizar el tercer amistoso pero el 'txingurri' no tenía opción y alineó hasta a siete jugadores que no realizaron la pretemporada con el resto de sus compañeros.
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Porque la gasolina le duró al Barcelona sesenta minutos. Jugó un buen primer tiempo habida cuenta las mencionadas circunstancias pero evidenció una notable falta de ritmo en el segundo tiempo. De hecho, Jordi Alba, Gerard Piqué, Sergio Busquets, Ousmane Dembélé, Luis Suárez y Leo Messi se estrenaron ante el Sevilla y Marc-André Ter Stegen apenas jugó cuarenta y cinco minutos en el tercer y último amistoso norteamericano. Sin embargo, elló bastó para doblegar al Sevilla y levantar la décimo tercera Supecopa de España de la historia del club azulgrana.
Valverde, de hecho, planificó con visión y se guardó jugadores de la talla de Philippe Coutinho y Arturo Vidal para marcar la diferencia, tanto en el plano defensivo como en el ofensivo, para asegurar la victoria y la jugada le salió a pedir de boca después de que sus futbolistas lograran imponerse al rival y sumar el tercer título con Valverde en el banquillo tras el doblete de la temporada pasada.
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