LaLiga pende de un hilo. De mometo, sólo se han aplazado dos jornadas pero la suspensión sine die de la competición como medida preventiva al contagio del coronavirus es una realidad firme. En este contexto, y en caso de no existir tiempo material para disputar las once jornadas que quedan hasta la conclusión una vez superada la crisis sanitaria, ¿cómo se resolverían el campeón, los equipos que acceden a competición europea y los descensos?
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Es una medida reflejada en el reglamento de la RFEF, que en el artículo 188 menciona la posibilidad de "alteración de las competiciones y de los períodos de inscripción" y añade que, "en caso de fuerza mayor o circunstancias excepcionales, la RFEF podrá suspender total o parcialmente las competiciones, así como prorrogar o reducir los períodos de inscripciones en coordinación, en su caso, con la Liga Nacional de Fútbol Profesiona, cuando así resulte legalmente oportuno".
El citado artículo del reglamento también hace referencia a una Comisión formada por el Secretario General de la RFEF, el de la LNFP y los Jefes de Competición de ambos y refleja que "tratándose de los Campeonatos Nacionales de Liga de Primera y Segunda División, las propuestas sobre el desarrollo de la competición, clasificación final y determinación de los clubs vencedores, corresponden a la LNFP, requiriéndose el previo acuerdo de la RFEF para llevarlas a efecto", de forma que sería LaLiga misma la que decidiría la clasificación del campeonato en caso de no poder disputarse por completo en una decisión que requeriría el visto bueno federativo. Si no hubiera consenso sería el presidente de la Federación, Luis Rubiales, quien resolvería la clasificación final.