¿Podemos apresurarnos a sacar conclusiones? ¿Está todo encajando a la perfección en las principales ligas de Europa?
Liverpool se enfrentó al Everton, el típico “partido trampa”, y aun así salió victorioso pese a la presión final. Manchester City y Arsenal les hicieron un favor jugando un empate 1-1, en el que cualquiera de los entrenadores podría haber preparado un equipo para ganar, pero ninguno parecía realmente querer hacerlo.
Ahora, Liverpool lidera con cinco puntos de ventaja, y todavía no está jugando a su mejor nivel. Más abajo en la tabla, el Manchester United venció al Chelsea… y luego pareció esforzarse por perder el partido. En Alemania, el Bayern de Múnich anota goles con facilidad, mientras que en Francia, aunque el PSG-Marsella se pospuso hasta el lunes por fuertes lluvias, nadie duda de que los parisinos se llevarán la victoria.
Por supuesto, esto puede cambiar en cualquier momento: Liverpool podría empezar a perder, el Arsenal decidir que quiere ganar, o el City encadenar veinte victorias consecutivas y nadie se sorprendería. Hasta entonces, solo nos queda observar desde lejos… y eso, quizás, no sea tan malo.
GOAL presenta El XI de Europa, con 11 observaciones clave del fin de semana.











