Otro intercambio vio a Messi tener un problema con Nehdi Ballouchy, el ex asistente estrella de la MLS de Nueva York. Parecía que en un momento Messi había hecho su punto y estaba preparado para alejarse, pero luego puso sus manos en el cuello de Ballouchy durante varios segundos, lo que generó una mirada de desconcierto del entrenador en cuestión, quien fue invitado a unirse al capitán del Inter Miami al dirigirse al túnel.