Ganar un título con la Selección argentina era la gran cuenta pendiente de Lionel Messi en su carrera. Y esa espina logró sacarla el 10 de julio del 2021, nada menos que en el Maracaná, cuando la Albiceleste cortó la racha negra de 28 años sin consagraciones. Luego llegó la Finalissima y por supuesto el Mundial, pero aquella noche fue el quiebre en la carrera del 10 en el equipo nacional, que buscará defender su corona y revalidar el título en Estados Unidos, con lugar asegurado en la final.
Con su aparición en la edición 2024, la Pulga disputó en su carrera un total de siete competencias continentales, incluída la edición Centenario, pero el título había sido esquivo hasta aquella noche mencionada. De hecho, es el futbolista con más presencias en los 105 años de historia del certamen, pero en tres ocasiones había quedado en las puertas de la consagración: en 2007 frente a Brasil y en 2015 y en la Copa América Centenario 2016 contra Chile.
Algunas imágenes de esos 14 años son imborrables: la sensacional conexión con Juan Román Riquelme en Venezuela 2007 y el gol a México, uno de sus mejores gritos con la Albiceleste; el flojísimo rendimiento individual y colectivo cuando era local en 2011 con todo a favor, para terminar eliminado por Uruguay en cuartos de final; el deseo de revancha en suelo chileno, el baile a Paraguay y la frustración de la final ante la Roja; el triplete a Panamá, el sensacional tiro libre a Estados Unidos y las lágrimas después de otra final perdida que antecedieron a la renuncia a la Selección que nunca fue; y la rebeldía en Brasil, la calentura por la injusta caída en semis ante el local y la pelea con Medel que le costó la expulsión en el partido por el tercer puesto. Pero nada podrá compararse con el abrazo de rodillas con Rodrigo De Paul en el centro del Maracaná para romper el maleficio.
GOAL repasa, estadísticamente, la carrera de la Pulga en el torneo: