Aunque solo tiene 21 años, los dioses del fútbol ya lo han puesto a prueba: pero la historia de Florian Wirtz, el más esperado 'Wunderkind' del fútbol alemán, cuenta cómo el talento puro, cristalino, no conoce de obstáculos insalvables cuando se encuentra con la tenacidad, la fuerza de voluntad y la urgencia expresiva típica de los artistas.
Hace poco más de dos años, Wirtz vio su mundo, lleno de expectativas alimentadas por su manera paradisíaca de tocar el balón, dar un giro dramático junto con su rodilla: la rotura del ligamento cruzado anterior sufrida durante un partido de la Bundesliga contra Colonia obligó a la joya del Bayer Leverkusen a renunciar a su sueño de vestir la camiseta de Alemania en el Mundial de Qatar.
Pero hoy esa herida, que habría puesto a prueba a cualquier futbolista -y mucho más a un chico de solo 18 años- es solo una cicatriz que recuerda a Florian cómo el presente y el futuro pueden ser aún más brillantes para aquellos que han visto con sus propios ojos la oscuridad absoluta.
El número 10 del Bayer Leverkusen ha vivido como protagonista la carrera del club de la farmacéutica hacia un título histórico: una Bundesliga increíble, dominada de principio a fin, que culminó de manera invicta por primera vez en el campeonato alemán y llevó al equipo de Xabi Alonso a la leyenda europea. Y todavía queda otro capítulo por escribir...
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