Mbappe & PSG divorce turning sourGetty

¿La cabeza de Mbappé ya está en el Real Madrid? El nivel de la estrella de PSG está en baja y Luis Enrique hace bien en reemplazarlo

Había solo cuatro aficionados del Paris Saint-Germain sosteniendo la pancarta, pero su mensaje era claro. El cuarteto de ultras se paró frente al ladrillo industrial del Parque de los Príncipes el domingo, mostrando con orgullo un trozo de tela con el texto "KM: Vivement LE 30/06". Traducción: "KM, esperamos con ansias el 30/06".

Y así ha comenzado otro giro en la historia de Kylian Mbappé. Tal vez se trate del amargo comienzo de un último capítulo turbulento, después de revelar su intención de dejar el club al final de la temporada. El jugador, por su parte, ha insistido en que hará todo lo posible por ganar trofeos antes de su partida y siempre ha manifestado su deseo de luchar en todos los frentes mientras aún esté vestido con la camiseta Air Jordan del PSG.

Esa buena voluntad podría no ser mutua, sin embargo. Desde que quedó claro que Mbappé no será parte de la plantilla parisina la próxima temporada, su relación tanto con el entrenador Luis Enrique como con una parte de la afición del club ha empeorado. El hombre de la marquesina ya no es el niño mimado.
Y en esta situación, después de años de haber sido el eje sobre el que giraba todo el proyecto deportivo del club, el goleador debería saber más que nadie que la crueldad está arraigada en el PSG. Ahora, irónicamente, está sufriendo las consecuencias de un entorno que él ayudó a cultivar. Luis Enrique, el autoritario implacable, tiene todo el derecho de sentar en el banquillo o hasta apartar de la alineación a un futbolista que, por bueno que sea, no estará más en el equipo dentro de menos de cuatro meses.

El artículo sigue a continuación