El salto de calidad del Arsenal de Arteta: más de 200 millones de euros en Kai Havertz, Declan Rice y Jurrien Timber

El inicio de este mercado de verano lleva el nombre del Arsenal. Varios de los nombres más importantes están vinculados a ellos. Incluso algunos ya han aterrizado en sus filas. El primero ha sido Kai Havertz. Su fichaje ha levantado muchas polvareda. 75 millones de euros por él, parecen muchos. Nadie duda de su talento, pero sí de su productividad. Además, no están claros ni su rol ni su posición en el campo. Lo más probable es que acabe jugando en el sitio de Xhaka, y es casi seguro que tendrá a Declan Rice a su lado. El inglés está a punto de cerrar su traspaso al Emirates 120 millones de euros.

Las dudas entorno al rendimiento de la estrella del West Ham se disipan. Pero sí se cuestiona su precio. Rice no ha jugado con regularidad al más alto nivel y pagar tanto por él es una apuesta que algunos tachan de descabellada. Al menos, su transición al norte de Londres debería ser fácil dada la presencia de sus compañeros de selección Bukayo Saka, Aaron Ramsdale, Ben White y Emile Smith Rowe.

A ellos, se les incoporará Jurrien Timber por unos 45 millones de euros. El holandés, de 22 años, puede situarse en varias posiciones de la defensa. Y aunque su precio gusta, no está claro donde acabará jugando. William Saliba es indiscutible. Podría situarse a su lado o en el lateral derecho.

Los 'gunners' confían en que los tres acaben convirtiéndose en piezas fundamentales en el sistema de Arteta. Y si alguno de ellos no cumple las expectativas, el técnico español tendrá que responder por sus inversiones.

Es cierto que el Arsenal tuvo mala suerte con las lesiones. Saliba y Gabriel Jesus se perdieron gran parte de la temporada. Zinchenko o Tomiyasu, también. Son solo algunos de los nombres que fueron baja y pusieron a prueba la profundidad de plantilla del equipo.

La falta de experiencia en el vestuario también fue un factor limitante. Arteta intentó inculcar una mentalidad ganadora fichando a Gabriel Jesús y Zinchenko. Al principio lo logró. Pero mantener el nivel durante toda la temporada ya es otra cosa. Saka, Martinelli, Partey y Gabriel Magalhaes, bajaron su rendimiento y el equipo acabó deshinchándose. Toda una experiencia de la que sacar varias conclusiones.

El ascenso del Arsenal, en Premier League, tiene más mérito por haberlo hecho mientras competía en Europa League. Lo que significa que sólo tenían dos días de recuperación antes de enfrentarse a su próximo rival de liga. Un riguroso calendario que agota a cualquiera.

El Arsenal lo notó y a final de temporada el cansancio acumulado pesó en sus piernas. Está próxima campaña sufrirán algo parecido. Seis años después vuelven a jugar la Champions. Aunque con esta competición tendrán más días de recuperación. La presión será mayor pero gestionar los esfuerzos será más fácil.

El Arsenal ha logrado mantener el núcleo de jugadores jóvenes que llevaron al equipo a luchar por el título de liga hasta el último día. Gabriel Jesús, Martinelli, Ramsdale y Saka ya ha firmado sus contratos de renovación. Saliba está a punto de hacerlo. Al igual que Odegaard. Arteta ha hecho todo lo que estaba en su mano para limitar el riesgo de que posibles pretendientes se llevasen a sus mejores jugadores, y seguirá haciéndolo.

Pero su confianza tiene que justificarse con títulos. Sino, los contratos a largo plazo serán examinados con lupa y la afición mostrará su descontento.

A pesar de que fueron el segundo equipo que más goles marcó en toda la liga (88), el Arsenal necesita más pólvora. Gabriel Jesús estuvo bien pero se perdió muchos encuentros por lesión y fueron el resto de sus compañeros quienes tiraron del carro.

Parece que Arteta ha encontrado entre los jugadores cedidos al delantero ideal. Folarin Balogun, de 22 años, jugó en el Reims la temporada pasada. Allí, superó todas las expectativas. El francés marcó 21 goles en 37 partidos de liga, a tan solo ocho de Kylian Mbappé.

Ahora hay dudas con él. Se cree que en un proyecto mayor sus numeros crecerían pero también, hay quien cree que no está capacitado para soportar tanta exigencia. Si los Gunners dejan marchar a Balogun, no habrá margen de error. Sería una pena que Arteta no le diera al menos la oportunidad de demostrar lo que puede hacer en el Emirates como delantero centro.

Si Balogun acaba brillando en otro sitio mientras el Arsenal sufre un declive en su producción ofensiva, Arteta quedará en el punto de mira. No tiene nada que perder con traerlo de vuelta, y la apuesta podría reportarle grandes dividendos.

Al parecer, una vez cerrados los contratos de Rice y Timber, el Arsenal seguirá buscando nuevos fichajes. El club se encuentra actualmente en una posición financiera fuerte después de clasificarse para la Champions League y, tienen controlada su masa salarial. Motivos por los que Arteta aún dispone de más dinero para reforzar la plantilla.

Con Partey y Xhaka en el mercado, puede que el Arsenal tenga que fichar a otro centrocampista. Moisés Caicedo interesa. Aunque también existen opciones más económicas.

Una de ellas es Romeo Lavia, del Southampton, que a sus 19 años abandonará St Mary's tras el descenso del club a la Championship. Al parecer, el belga está valorado en unos 55 millones de euros. Sin embargo, si esperan demasiado podrían acabar perdiéndolo. El Liverpool está tras sus pasos y habría que darse prisa.

Gabri Viega, Moussa Diaby, Iván Fresneda, y Marc Guehi gustan. Sin embargo, otro jugador del City ilusiona. Joao Cancelo pasó la segunda mitad de la temporada pasada cedido y los de Guardiola estarían dispuestos a venderlo.

Pero al gastar mucho, te expones a las críticas. Las excusas se acaban y si el Arsenal no progresa la próxima temporada, nadie tendrá compasión con ellos.