El Clásico Nacional llegaba con un panorama inusual. América, en un momento de crisis, se encontraba en el 12º puesto de la tabla tras una dolorosa derrota por 4-1. Chivas, por el contrario, llegaba inspirado, ocupando la 6ª posición y con el impulso de una victoria contundente de 5-0 sobre Bravos de Juárez. A pesar de esta diferencia en el momento de forma, las Águilas lograron imponerse por la mínima.
El solitario gol de Ramón Juárez fue suficiente para que América se llevara el partido. A pesar de la constante presión del Rebaño, que generó varias oportunidades claras, el marcador no se movió más. Chivas tuvo opciones claras de empatar, sobre todo a través de la 'Hormiga' González, quien falló en momentos cruciales frente al arco.
América, que llegaba como "no favorito", se mostró sólido en defensa y supo aprovechar la única oportunidad que se le presentó, mientras que la falta de contundencia de Chivas definió el rumbo del partido. Con esta victoria 1-0, las Águilas no solo se quedaron con el orgullo del Clásico, sino que también lograron un triunfo vital para cambiar el rumbo de su complicada temporada.